“En diciembre parecía que iba a rebalsar pero en enero se paró todo. Hay pocas ventas, mucha gente averiguando y buscando precios y visitantes que cuidan mucho el bolsillo”, relató María, de una casa de campera céntrica. Al igual que ella, Gastón (dueño de una tienda de cueros) se mostró desconcertado y hasta enojado: “Vienen pocos turistas y no gastan un mango”, sentenció.

Las ofertas se empiezan a ver en las vidrieras, con descuentos y 2x1 para tentar a los paseadores. “Es lo que más aprovechan, tratan de llevarse algo pero ahorrar. Es diferente al turismo del año pasado, cuando aprovechaban con la tarjeta o con débito y se llevaban de todo. Ahora se cuidan más y preguntan mil veces pero de a poco va remontando”, destacó a Cazador de Noticias Ernesto Cuevas, de una casa de indumentaria deportiva del paseo de la calle Rivadavia.

En el centro comercial de San Juan las caras son las mismas que en el micro y macrocentro. Aún así, hay expectativas con respecto a la segunda quincena: “Siempre repunta y por ahí la gente está especulando un poco. Esperemos que el clima nos acompañe y repunten las ventas. De cualquier manera, sigue siendo un verano bastante olvidable”, comento Isabel Machado, vendedora de sweaters.