No es la primera vez que surge el reclamo pero sí se realizó una de las más grandes y masivas marchas en contra de la empresa. “Edea tiene muchos incumplimientos pero lo más grave es que no tiene diálogo con el gremio mediante los mecanismos necesarios ni con las instituciones. La empresa no reconoce los ámbitos de resolución democráticos”, indicó Rigane a Cazador de Noticias.

Entre las denuncias principales, describió que “se contrata y subcontrata a trabajadores mal encuadrados, no hay vehículos y se incorpora tecnología no permitida”. “Hay una política de achicar a toda costa. Tienen la mayor recaudación con la menor inversión”, denunciaron desde el gremio.

A su vez, reflexionaron que “el Estado se podría hacer cargo de este servicio”. “Si no cumplen, hay que recurrir al fin de la concesión”, sostuvo Rigane.