El hecho ocurrió cerca de las 23 del domingo, cuando los ladrones desconectaron la alarma de una casa ubicada en Talcahuano y Rosales, entraron por el techo y golpearon al perro de la familia que no paraba de ladrar. Una vecina escuchó los ladridos del animal y sostuvo que llamó a la policía en “reiteradas ocasiones”, pero “no pasó ningún patrullero”.

Los delincuentes se llevaron plata y algunos elementos de valor. Además rompieron varios objetos de la familia y revolvieron todos los muebles de la casa. En el lugar trabajó personal del CPC y efectivos de la comisaría N° 3.

En noviembre del año pasado, un anciano había sido asesinado en un violento asalto en la misma cuadra y durante los últimos días también se registraron otros hechos de inseguridad. Los vecinos sostienen que el barrio es “zona liberada”