El jueves Santo, es el día en que toda la Iglesia Católica recuerda y conmemora la "Última Cena" de Jesús con los apóstoles. Se repite en todas las parroquias y templos del mundo, el gesto del lavatorio de los pies y se rememora la institución de la eucaristía.
Monseñor Antonio Marino, obispo de Mar del Plata, presidió la celebración en la Iglesia Catedral, y este año, realizó un significativo y profundo gesto: lavó los pies de doce bebés, venidos desde distintos barrios y muchos de la periferia marplatense.
"Hoy celebramos la Cena del Señor, durante la cual, antes de consumar su misterio pascual, nos dejó el memorial sacramental de su amor redentor. Nuestro Salvador mandó a sus apóstoles hacer en su memoria lo mismo que Él hizo con los signos del pan y del vino. De este modo, el don inestimable de la Eucaristía quedó indisolublemente unido al don del sacerdocio", inició diciendo el obispo en su homilía.
"El mandato de reiterar los gestos sacramentales: 'Hagan esto en memoria mía', va acompañado de otro que Jesús expresa después de lavar los pies a sus discípulos, según palabras que figuran en el relato del Evangelio de San Juan: 'Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes'. Es el mandato del amor mutuo que tiene en Jesús su modelo y su fuente y sobre el cual vuelve más adelante: 'Les doy un mandamiento nuevo: ámense los unos a los otros. Así como yo los he amado, ámense también ustedes los unos a los otros. En esto todos reconocerán que ustedes son mis discípulos: en el amor que se tengan los unos a los otros'. Eucaristía, sacerdocio, amor servicial mutuo. Esta es la síntesis del sentido del Jueves Santo", detalló Monseñor Marino.
En este Año de la Misericordia, el pastor de la Iglesia Católica pidió, "que estas palabras del Señor nos interpelen y nos muevan a consecuencias prácticas". "El amor fraterno no es un sentimiento vago, sino gesto concreto, actitud sostenida en el tiempo y compromiso de vida. Cada parroquia y cada diócesis se esmera, a través de una red de caridad, en dar cumplimiento al mandato del Señor, creando canales de participación para socorrer a los hermanos necesitados, y si nos lo proponemos terminamos hallando nuestro modo de colaborar".
Finalmente, también se refirió al "Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia", y de esta manera, el obispo recordó las palabras que los obispos a través de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal, pronunciaron días atrás, "la memoria del 24 de marzo, este año, coincide con la celebración del jueves santo, día de dolor y de traición, pero también día en que Jesús manifestó su amor hasta el fin entregando la vida por nosotros. En su Sangre hemos sido reconciliados. 'Cristo es nuestra paz' y el fundamento de una esperanza que nos impulsa a construir una sociedad auténticamente humana. Su ejemplo nos ayuda a cicatrizar nuestras heridas en la verdad, el arrepentimiento, la reparación en justicia y el anhelo de alcanzar misericordia”. Y pidió a la Virgen que interceda antes Jesús "por nosotros y por nuestra patria necesitada de reconciliación".
Luego de la homilía, monseñor Marino se dispuso a lavar los pies de los doce bebés que fueron sostenidos por sus mamás visiblemente emocionadas por tan significativo gesto. Fue un claro mensaje de defensa y cuidado de la vida más débil representada por estos bebés muchos de los cuales no alcanzaban el año de vida.
Al finalizar la misa se realizó la "Hora Santa", en la que los fieles hasta la medianoche adoraron al Santísimo Sacramento, en un gesto de acompañamiento a Jesús.
Viernes y Sábado Santo, Domingo de Pascua
Mañana viernes Santo, día de ayuno y abstinencia de carne para todos los católicos, el obispo presidirá a partir de las 15, la liturgia de la pasión y muerte del Señor. A las 20 comenzará el solmene vía crucis rezado por las calles del centro, una manifestación de fe y silencio, los fieles llevan velas en sus manos. A las 22, es la recepción de la Virgen de la Macarena, acompañada por la colectividad andaluza.
El sábado Santo, la actividad principal en el templo mayor de la ciudad es a la 21 con la Vigilia Pascual, donde a través de diversos signos se expresa la alegría y el gozo de la resurrección de Jesucristo. Monseñor Marino bendecirá el fuego nuevo, preparará el cirio pascual y el lucernario, hay una extensa liturgia de la palabra, y se realiza la liturgia del agua bautismal. El Domingo de Pascua, el obispo presidirá la misa en la parroquia del barrio El Martillo, Cristo Resucitado ubicada en Nápoles y Friuli y será a las 11.
Otras actividades en las parroquias
Las parroquias informaron que habrá actividades religiosas y también algunas artísticas. La parroquia Sagrada Familia del puerto marplatense, realizará un Vía Crucis Viviente a las 17.30 horas partiendo desde Avenida de los Trabajadores y Padre Dutto. Por otro lado, también la parroquia Nuestra Señora de Luján de Batán, tendrá un Vía Crucis Viviente denominado "La Pasión" en la puerta de la parroquia ubicada en Ruta 88 km 17. La parroquia Santa Teresita de Nicanor Otamendi, también viene preparando desde hace muchos meses, junto a toda la comunidad y el pueblo "La Pasión. El camino de la misericordia" que se realizará en el Club "Circulo Deportivo" el viernes Santo a las 20 y el domingo 27, de Pascua a las 18 horas en el mismo lugar.
En lo musical, la parroquia Asunción de la Santísima Virgen, realizará también el domingo 27 a las 17.30, un concierto de Pascua, denominado "Proyecto creciendo en armonía", bajo la dirección musical de Ulrike Flemming, de la Fundación Cultural Argentina - Asociación servidoras con entrada libre y gratuita, en el templo parroquial ubicado en Santa Fe 2973.
Por último continúa la muestra "El rostro de la misericordia. Mártires del siglo XX y XXI", que se puede visitar del jueves al domingo de 10 a 12 y de 18 a 20 en el Pasaje Catedral, tambié
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