La diputada marplatense Alejandra Martínez le solicitó al Ejecutivo provincial que interceda ante el Ente Nacional de Regulación del Gas (ENARGAS) con el fin de modificar los cuadros tarifarios del gas a las condiciones climáticas de Mar del Plata y su zona de influencia.
Para la legisladora: “esta región Mar y Sierras, en modo alguno puede tener los parámetros de consumo de la Capital Federal y el Litoral, y esto impacta de manera directa en el consumo de gas para calentar los hogares. Los usuarios de esta región tienen las mismas pautas de categorización que el Litoral, cuando las temperaturas entre uno y otro son fundamentalmente opuestas. En Mar del Plata, por ejemplo, superar los 1800 m3 anuales es lo ordinario y por consiguiente quedar atrapado por la máxima y más cara de las categorías con la gravedad que esto implica sobre todo teniendo en cuenta el reciente aumento de tarifas”.
En los fundamentos del proyecto se establece el rechazo al incremento de tarifas dispuesto por la Resolución 1/3732 y se solicita a la Gobernación que gestioneante el ENARGAS para dar una pronta solución con respecto a las categorizaciones planteadas que perjudican a los usuarios marplatenses.
Asimismo, se fundamenta que el Decreto 2255/92 por el que se modificaba el decreto reglamentario de la ley 24076, reconocía una sola categoría Residencial. Es decir, la categoría R que alcanzaba a todos los usuarios domiciliarios, circunstancia que se ajustaba expresamente al texto de la citada ley. Posteriormente, el decreto 181/2004 reguló más allá de lo indicado por la ley reglamentada, al crear con su artículo 10 la subdivisión de la categoría Residencial (R) en tres subcategorías: R1, R2 y R3. De tal manera, a Camuzzi Gas Pampeana para la zona de distribución que afecta a General Pueyrredón, Alvarado, Balcarce y Mar Chiquita entre otras, se le aplicó una pauta de consumo similar a la de Capital y Gran Buenos Aires, Centro y Litoral, cuando geográficamente la ciudad de Mar del Plata se encuentra casi a la misma altura que Bahía Blanca, pero además con registros térmicos históricos drásticamente inferiores respecto de las citadas zonas.
En este sentido Martínez sostiene que: “solo quien vive en la Capital puede confeccionar un cuadro de consumo tal alejado de la realidad. Además hay que tener en cuenta que esta reglamentación ha sufrido a lo largo de los años modificaciones y re-categorizaciones que han agravado aún más la situación original”.