El presidente de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social, Jorge Lozano, manifestó la "preocupación" de la Iglesia por la situación "particularmente en algunos hogares, que no tienen lo elemental para una vida digna".
Luego del informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) que precisó que desde diciembre hay 1.400.000 pobres más en el país, el obispo de Gualeguaychú manifestó la "preocupación" de la Iglesia por la situación "particularmente en algunos hogares, que no tienen lo elemental para una vida digna".
"Hay familias en las que sus hijos se van con hambre a dormir; hay otras que, aún cuando tengan comida, es de baja calidad; tienen la panza llena pero no una alimentación adecuada", advirtió.
En declaraciones a radio Continental, el purpurado sostuvo que "estas situaciones son las que preocupan y de lo que ahí se deriva después: el abandono escolar, la falta de trabajo, la falta de perspectiva y los riesgos de caer en la droga o en algún tipo de actividad que no le hace bien ni a la persona, ni a la familia ni a la sociedad".
Tras las advertencias del papa Francisco sobre las "personas marginadas" y las palabras del director del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, Agustín Salvia, acerca de que las medidas oficiales "no alcanzan" para frenar el crecimiento de la pobreza, Lozano se pronunció en la misma línea.
En este marco, advirtió que en los últimos tiempos se observa que un porcentaje de la "clase media baja va a la pobreza".
"Los programas que ha desplegado el Gobierno respecto de ampliar la base de la Asignación Universal por Hijo o la reducción del IVA buscan atender a los sectores más desprotegidos, y aún así no alcanzan, pero los que más están sufriendo son los que llaman los nuevos pobres: aquellos que viven de una changas y que, por el aumento importante de los costos de los alimentos, o la disminución de su trabajo, se les hace más difícil salir adelante", puntualizó.
Al señalársele las condiciones de carencia extrema que se observan en algunas zonas del conurbano, el obispo advirtió que "el tipo de necesidad que en esos lugares son de una mayor presencia del Estado; no se sale solamente aumentando más caudal de dinero o dándoles cinco mil pesos más por mes o 10 mil".
"Hace falta de una presencia del Estado que tenga que ver con educación, con clubes, con capacitación laboral. Mucha gente que vive en condiciones de pobreza no ha terminado la escuela primaria, no tienen el DNI, hace mucho que no asisten a un centro de salud", enumeró.