El hallazgo se produjo esta tarde en una vivienda de calle 14 y 514, cuando la policía llegó al lugar avertida de lo ocurrido por el supuesto hermano de la víctima. Al parecer, el hombre se presentó en la comisaría de la zona y denunció que el joven estaba muerto en la propiedad mencionada, a la que los bomberos habían acudido el jueves pasado de madrugada para apagar un incendio de pasto.

Los uniformados advirtieron que en la zona trasera, al lado de un galpón quemado, estaba tendido el cadáver de un hombre. Debido a su estado esquelético -ya que fue comido por los perros de la calle- aún no lograron determinar su identidad.

De todas formas, y producto de los datos que dio el denunciante, sospechan que se trata de su hermano. Además, junto al cuerpo del joven estaba el de su propio perro, que también murió calcinado.

De acuerdo a la información que trascendió, el fiscal Fernando Castro cree que la víctima murió el jueves a la madrugada y que, con la oscuridad de la noche, los bomberos no encontraron su cadáver cuando fueron a apagar el incendio. Eso habría motivado, además, que apareciera hoy entre escombros.

Cabe destacar que los investigadores analizan las pruebas del caso para conocer las causas de la muerte. En ese marco, no descartan que se haya tratado de un crimen.