El delincuente que falleció el viernes en la noche tras enfrentarse a tiros con el dueño de un minimercado de Los Pinares, tenía 19 años y recibió al menos dos disparos en la cabeza que le produjeron la muerte de forma instantánea. También se supo que tenía antecedentes penales.
El joven fallecido fue identificado como Claudio Marcelo Dusinsky se lo conocía por el alias de "Cototo" y formaba parte de una facción de la barra del Club Quilmes y contaba con antecedentes penales al punto de haber estado detenido hasta hace poco tiempo.
Por otra parte se supo que dos de los disparos que realizó el comerciante de 57 años dentro del minimercado de Ortega y Gasset y Falkner le impactaron en la cabeza y en pleno rostro.
En la escena del crimen, el pasillo central del comercio, la Policía Científica recogió seis vainas calibre 9 milímetros y dos pistolas de ese calibre, una propiedad del dueño del negocio y otra que es la que llevaba el asaltante. El hecho se registró pasadas las 21 cuando el delincuente, aparentemente solo, llegó al minimercado y pretendió cometer el asalto. En el interior se hallaba el dueño y su esposa, quienes advirtieron de inmediato la gravedad de la situación.
Luego sucedió una secuencia que ahora investiga el fiscal Fernando Castro pero que terminó con el hombre herido de bala en la espalda y con el delincuente abatido. A los pocos minutos llegaron al lugar patrulleros de la comisaría séptima y una ambulancia que trasladó al comerciante hasta el Hospital Interzonal, donde se pudo comprobar que la lesión que aparentaba ser severa no había afectado órganos vitales. El proyectil lo había herido en el omóplato izquierdo. En tanto el ladrón fue alcanzado por una bala en el pómulo izquierdo y otra en la sien derecha.
El fiscal Castro analizará el informe balístico que en los próximos días la Policía Científica, datos que serán claves para determinar la mecánica del enfrentamiento. También si el comerciante poseía autorización para el uso de la pistola 9 milímetros, aunque en el caso de no tenerlo se configurará otro delito que no afectará la naturaleza del homicidio. Por presumirse que actuó en el derecho de la legítima defensa, el comerciante no fue detenido.