Un menor de un año y medio murió ahogado tras caer a la pileta de una casa quinta situada sobre la avenida 37 al 3800 de Miramar. En el momento del hecho, el niño se habría alejado de los adultos que se encontraban almorzando en la casa, quienes minutos más tarde notaron la ausencia del bebé pero ya era tarde.
El hecho ocurrió alrededor de las 16 y según datos brindados, en determinado momento el menor se habría alejado de la madre, su pareja y otro grupo de personas que se encontraban almorzando en ese sitio y cayó a la piscina, sin que esto fuera advertido por los mayores.
Minutos después notaron la ausencia del pequeño y se dirigieron al lugar en donde desesperadamente lograron sacarlo desvanecido, prácticamente sin signos vitales.
Pese a haber llamado al servicio de urgencias del hospital local, familiares decidieron llevar al bebé en un auto particular y se encontraron en el camino con la ambulancia, donde el médico lo recibió sin vida, pese a algunos intentos por reanimarlo.
Luego, ya en el nosocomio “Marino Cassano”, finalmente se comprobó el fallecimiento por inmersión y posterior paro cardiorespiratorio.
La situación dentro del hospital fue caótica ya que la mamá de la víctima (de 24 años y origen dominicano) junto a otro individuo que había participado del rescate, sufrieron sendas descompensaciones y debieron ser atendidos.
Al momento la causa está rotulada como “Averiguación causal de muerte”, con intervención de la fiscalía de Miramar. Si bien todo indica que el episodio ocurrió por accidente se realizarán las actuaciones correspondientes y toma de declaraciones de rigor.