Los datos son tremendos, a priori. Se habla, supuestamente, de unas 200 denuncias y de aproximadamente 5 millones de dólares como saldo. Mientras tanto, la Justicia está detrás de los pasos del analista de mercados internacionales y comunicador, Daniel Viglione, a quien se sindica como el responsable de lo que muchos dan por hecho: una multimillonaria estafa.
Sucede que a medida que pasan los días y desde aquel 21 de octubre en el que Viglione "desapareció", se suman las denuncias, al tiempo que Migraciones, por ejemplo, da cuenta que "oficialmente" éste sujeto no habría salido del país.
Y las declaraciones del abogado Julio Razona, quién patrocina a una veintena de personas que presuntamente resultaron estafadas, sonaron fuertes y la noticias se convirtió en información nacional, tras una entrevista que TN le realizó al letrado marplatense.
Dijo Razona a ese medio, perteneciente al Grupo Clarín, que "durante 14 años este falso operador (por Viglione) de inversiones en el mercado financiero internacional, en Nueva York y en Londres, realizaba contratos de adhesión y estafó al menos a 200 personas". Razona afirmó que éste jueves se presentará ante la Fiscalía de Delitos Económicos de Mar del Plata con otras 20 denuncias, que se suman a las 23 que se habían recibido en el despacho del fiscal Fernando Berlingeri.
Mientras continúan para dar con su paradero, se multiplican las denuncias contra "el analista" y la Justicia tiene en la mira -también- al entorno familiar y a otras personas que actualmente se encuentran en el exterior.
Daniel Viglione, hombre que desde hace años ha pasado por varios medios, tuvo activa participación en los últimos tiempos en Radio Mitre Mar del Plata (frecuencia 103.7) desde dónde algunos de los damnificados consideran "que utilizó como trampolín para atraparnos".
Y no es para menos. Radio Mitre es una radio escuchada en la ciudad, máxime cuando los micros de Viglione también salían en el programa "Lanata sin filtro", de Mitre central, que conduce Jorge Lanata, por un acuerdo económico -según dicen- entre los responsables de la emisora marplatense y la de Capital Federal.
Eso también determinó un "imán" para que los inversionistas (desgraciadamente después víctimas) se decidieran a aceptar los consejos de Viglione.
Es más. Mitre Mar del Plata fue la radio en la que más tiempo estuvo quién hoy es afanosamente buscado por la Justicia. Y desde su programa en la 103.7, denominado "Economy Geeks", se publicitaba su "otra" actividad privada, con números de teléfonos, direcciones, turnos y redes sociales.
La causa por defraudación que involucra al “analista de mercados a futuro” Daniel Viglione sumó varias denuncias e incorporará una cifra similar con la presentación conjunta que hará este jueves el mismo Julio Razona. Y, además, en ese acto, el letrado solicitará que se impute al periodista de ser "organizador de una asociación ilícita de la que participaba su esposa, su hijo y una socia radicada en el exterior", más precisamente en España.
Es el mismo diario Clarín quién publicó que Razona va a denunciar también a la mujer de Viglione (Claudia Fernández) y a su hijo Luis. Según el abogado, "sin la ayuda de ellos no hubiese podido hacer esto. Tampoco fugarse. Ellos formaron una SRL con el objeto de ejecutar esta operación”.
“Viglione abría cuentas en el extranjero con datos de personas que no sabían que eso iba a suceder. Pero esto lo hacía junto a otras personas. Nosotros vamos a denunciar a Viglione por asociación ilícita, con él como líder. No pudo hacer esto solo, es una banda”, agregó Razona.
Y en el mismo portal de noticias clarin.com, Razona, a la hora de dar nombres, fue contundente: "Junto a Viglione también estaba la licenciada María Larsen, que era la que recibía el dinero. La hija de esta señora, que está radicada en España y que abrió varias cuentas corrientes a la que Viglione envió dinero". Viglione conducía su programa “Economy Geeks” en la repetidora de radio Mitre de Mar del Plata (www.mitremardelplata.com — FM 103.7) y tenía un blog (https://dviglione.blogspot.com.ar), donde daba informes y recetas financieras. Su programa en la emisora local se emitía de 16 a 17 en el 2014 y en 2015 después del espacio que habitualmente conduce Alfredo Leuco.
Viglione, en sus emisiones, acostumbraba a dirigirse a su "comunidad". Y, precisamente, en el último mensaje "a la comunidad" que dejó en su canal de la web Listendat, el 17 de octubre, habló de “un proceso de cambios profundos”, de complicaciones que tenía “con la nueva compañía con la que estamos trabajando en Nueva York” y se refirió “a las peticiones concretas, reales, y absolutamente genuinas” que le estaban haciendo: sus clientes le estaban exigiendo que les restituyera su dinero.
Los investigadores creen que Viglione habría realizado una estafa mediante el “esquema Ponzi”: a los primeros inversores se les pagan supuestos dividendos con lo que ponen los clientes que llegan después; las ganancias son tan jugosas que se corre el boca a boca y se multiplican los interesados. En algún momento, el autor del engaño deja de pagar “dividendos” y se queda con todo.
“Hasta el momento, Migraciones no nos ha referido que haya salido. Yo no puedo dar mayor información respecto a la posibilidad de encontrarlo porque no quiero frustrar a la investigación”, señaló Berlingeri.
Según el fiscal, Viglione utilizaba “un lenguaje que cautivaba” para convencer a la gente que invirtiera y su programa de radio “era muy escuchado”.
Berlingeri, también en diálogo con el canal Todo Noticias (TN), relató que “la presentación de la operación (económica) era bastante creíble”.
“Entregaba unos formularios con los logos del broker internacional, y este era el respaldo de la entrega del dinero”, agregó el funcionario judicial.
Viglione pedía a los damnificados “10 mil dólares que era el mínimo para invertir”
Berlingeri subrayó: “Empezó a presentarse gente diciendo que este señor les debía dinero y la propuesta era invertir divisas extranjeras a través de una rentabilidad de entre un 30 y 40 por ciento anual de interés”.
Para las próximas horas, se aguardan algunas novedades sobre éste hecho que realmente ha causado conmoción y cuyos resultados, en cuánto a víctimas de buena fe, parecen ser imprevisibles.