Por Mario Mazzitelli
Secretario General del Partido Socialista Auténtico (Argentino)
“Ahora esta masa anónima, esta América de color, sombría, taciturna, que canta en todo el Continente con una misma tristeza y desengaño” ha perdido a uno de sus más altos representantes. Los excluidos, humillados y explotados perdieron a uno de los más grandes revolucionarios del siglo XX.
Otras capas sociales, integrantes de los sectores altos de la sociedad, que supieron concentrar riqueza y poder, sentirán que se cierra una etapa signada por el cuestionamiento al orden existente y la libertad creadora de pensar en una sociedad distinta, basada en la solidaridad, la igualdad y el protagonismo de las masas.
Fidel, como antes el poeta y revolucionario José Martí, le dieron a Cuba una dimensión americana y mundial.
Protagonista principal en épocas épicas, hoy se apaga su existencia biológica. Sus principios, sus ideas, sus escritos y su voz, sin embargo, seguirán retumbando en un tiempo que ha llevado la injusticia social al paroxismo. Donde tan solo 62 personas en el mundo poseen tanta riqueza como los 3.600.000.000 más pobres. Donde el 1% más rico tiene más patrimonio que el 99% restante. O donde 50.000 personas mueran todos los días de muertes evitables por carecer de los más elementales bienes y servicios que hacen al vivir con dignidad.
El pueblo de Cuba, mayoritariamente, acompañará a su líder en el día de hoy. Millones de seres humanos en los cinco continentes sentirán que han perdido un referente excepcional.
La vida sigue. Pero aunque pasen muchos años la memoria colectiva de los pueblos seguirá conservando la idea que Fidel, junto a Camilo Cienfuegos, el Che Guevara y un pueblo sediento de justicia, pusieron las piedras basales de la futura sociedad humana. Frente a la fratricida avaricia y codicia de unos pocos, alienados en optimizar la tasa de ganancia de sus fortunas aunque sea al costo de explotar y excluir seres humanos y sacrificar el ambiente; se levantan los principios de fraternidad, igualdad, libertad y el socialismo; como los faros que iluminan el mejor camino para una humanidad en peligro.
En el día de su paso a la inmortalidad, honor al Comandante Fidel Castro.
Aclaración: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.