El titular del partido Mar del Plata, Puerto y Región (MPR), Daniel Sosa, cuestionó las obras que se hicieron en medio de ambas manos de la ruta 88 de tal manera que la localidad de Batán quedó dividida en dos por un largo muro que solo permite pasos de un lado al otro cada cientos de metros.
“Partir en dos una localidad, como se ha hecho con esta obra, de ninguna manera puede tener sentido”, advirtió el ex concejal que ayer recorrió la zona y pudo recoger el malestar de los vecinos, disconformes por la forma en que se resolvió la división entre ambas calzadas, una en sentido a Mar del Plata y la otra hacia Necochea.
Sosa sostuvo que el gobierno provincial, de la manera que encaró esta obra, dejó a 20000 vecinos de cada lado del muro. “Pudimos ver como personas discapacitadas, que se desplazan en sillas de ruedas, tenían que recorrer más de 400 o 500 metros para encontrar un paso que les permita llegar al otro lado de la ruta”, describió.
También consideró que el recurso elegido no contribuyó a la seguridad vial. Dijo que en los últimos días se produjeron allí una docena de accidentes, uno de ellos este mismo lunes, momentos antes de que Sosa y colaboradores del MPR recorrieran el barrio.
“Reconocemos que se están haciendo mejoras en la ruta 88, pero lo ideal es que se realicen como corresponde”, afirmó. Comparó la obra realizada con tramos similares de ruta 2, a la altura de Dolores y La Plata. “La diferencia es que allá se hizo en plena autovía y acá se hizo en el medio de los vecinos, que quedan en riesgo porque se generaron condiciones para que los autos puedan circular a más velocidad”, dijo.
Como se trata de un sector muy urbanizado, Sosa estimó que lo más conveniente hubiera sido instalar semáforos que permitan regular la velocidad del tránsito y dar mayor seguridad a los peatones, con momentos de libre tránsito para que ellos puedan cruzar la calzada. “La gente se queja y tiene razón”, afirmó.