La delegación local del Sindicato Argentino de Docentes Privados denuncia que el colegio San Agustín de Mar del Plata despidió de forma arbitraria e intempestiva a varios trabajadores luego de comunicar a las familias la decisión de cierre de un curso.
Los responsables de la institución dejaron a sus docentes con la incertidumbre sobre su situación, ya que negaron contestación ante las consultas del gremio y de cada uno de los afectados en particular.
En una maniobra dilatoria, a pesar de la angustia de los trabajadores sobre su futuro laboral, e ignorando la enseñanza del Papa Francisco en cuanto a que “causar una pérdida en puestos de trabajo significa causar un grave daño social”, “el trabajo es sagrado, el trabajo da dignidad a una familia y debemos rezar para que no falte el trabajo a ninguna familia, su falta daña también al espíritu”; el representante legal envió telegramas de despido sin causa a varios docentes de la escuela, sobre los últimos días del año. Esta decisión perjudicial y tardía impidió hallar soluciones conjuntas (como reubicación de las horas) y en algunos casos, la búsqueda de trabajo en otras instituciones para recuperar lo perdido.
Hay una fuerte contradicción entre los objetivos que el colegio postula para sus alumnos “Formarse como buenos ciudadanos, responsables y capaces de trabajar en pos del bien común y no sólo del propio. Asumir la importancia del respeto por un sistema democrático en el cual todas las voces tengan derecho a ser escuchadas” y las decisiones que toma. A lo doloroso del hecho de perder el empleo, se suma la falta de consideración y de espíritu cristiano en el manejo de la situación.
La delegación Mar del Plata del Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP) denuncia que esos despidos responden a una intención disciplinadora, dado que su alcance fue más allá de las horas afectadas por el cierre del curso y recayeron sobre docentes con intachable desempeño.
“Repudiamos los despidos en el Colegio San Agustín, como así también sus prácticas persecutorias y desconsideradas hacia los docentes que día a día sostienen la escuela con vocación y responsabilidad. Asimismo, exigimos que se terminen las prácticas empresariales de los colegios que, como el San Agustín, reciben el aporte estatal (que surge del esfuerzo de todos los contribuyentes), y que luego lo destinan al financiar despidos. Otros tantos colegios de nuestra ciudad están generando despidos injustos, arbitrarios, queriendo instalar el miedo y la resignación de derechos a cambio de conservar el empleo” sostuvo Ángel Guarás, secretario general de SADOP
Serias irregularidades en jardines de infantes, ataques a la libertad sindical, empleo no registrado, malos tratos, son algunas de las situaciones que sufren los docentes privados.
“Desde SADOP profundizaremos acciones gremiales y legales tendientes a frenar los atropellos hacia los trabajadores y a defender los puestos de trabajo. A la prepotencia patronal responderemos con más organización, más convicción, más solidaridad, más movilización”, concluyó el comunicado que firman Bruno Roldán y Adriana Donzelli.