El Tribunal Supremo, controlado por el presidente Maduro, acusó de desacato al Legislativo y tomó el poder del Parlamento.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, denunció un "auto golpe de Estado" en Venezuela, donde el máximo tribunal asumió papel legislativo y removió la inmunidad parlamentaria a los miembros de la Asamblea Nacional (AN).
Estas dos decisiones constituyen "los últimos golpes con que el régimen subvierte el orden constitucional del país y termina con la democracia", señaló Almagro en una nota oficial. Además, dijo: "Aquello que hemos advertido lamentablemente se ha concretado".
Miles de venezolanos se concentraron frente al edificio del Tribunal Supremo -controlado por Maduro- para protestar contra la decisión de de disolver la Asamblea Naciona y asumir sus competencia. Según la Justicia, los legisladores, en su mayoría opositora, están en "desacato" desde el año pasado.
"Es un golpe de Estado, y quiero que el mundo nos ayude y los medios nos ayuden a decirlo con todas sus letras: en Venezuela Nicolás Maduro dio un golpe de Estado", aseveró el presidente de la AN, el opositor Julio Borges, en una rueda de prensa desde las escalinatas del Palacio Legislativo.