Micaela García, la joven encontrada el sábado asesinada en la ciudad entrerriana de Gualeguay, murió estrangulada el 1 de abril último, el mismo día en que desapareció cuando regresaba de bailar, según lo determinaron este lunes los médicos forenses que realizaron la autopsia, informaron fuentes judiciales.
En tanto, hoy se supo que la organización Amnistía Internacional advirtió que el asesinato de la joven entrerriana "visibiliza la ausencia" de políticas públicas integrales contra la violencia de género e instó al Poder Ejecutivo a implementar medidas para relevar el número de femicidios en el país.
La autopsia, realizada en la morgue judicial Oro Verde de Paraná, no pudo determinar si la joven fue víctima de violación, por lo que se realizarán nuevos estudios, pero reflejó "indicios de ataque sexual", según un comunicado del ministerio Público Fiscal de Entre Ríos.
El director de Criminalística de la Policía de Entre Ríos, Angel Iturria, dijo que "no hay que descartar" que haya restos de piel del acusado bajo las uñas de la joven y afirmó que "las alimañas comieron una mano por completo al igual que los dedos de los pies, y en la otra mano tenía solamente dos dígitos".
El acusado de perpetrar el asesinato de la joven, Sebastián José Luis Wagner, de 30 años, permanece detenido en la unidad penal número 8 de la localidad entrerriana de Federal, y el director del Servicio Penitenciario de Entre Ríos, José Luis Mondragón, explicó que fue trasladado desde Gualeguay para tomar "precauciones para preservar su vida y su integridad física".
El ministro de Justicia, Germán Garavano, insistió en que el juez de Ejecución Penal entrerriano Carlos Rossi, quien liberó a Wagner cuando cumplía una condena por dos violaciones a pesar de una recomendación contraria, afirmó que el magistrado debería dar "un paso al costado".