La fábrica harinera ubicada en avenida Luro y Chile, comandada por la firma Andrés Lagomarsino SA – según la palabra de sus propios trabajadores – anunció el final de sus actividades. A la vez, suspendió a 62 empleados por un lapso de 75 días. “Nos dijeron que la empresa da pérdidas, que así no se puede trabajar, que no les dan los costos para seguir funcionando”, declaró Daniel Omar Fernández, uno de los afectados.

En diálogo con Cazador de Noticias, el delegado explicó que “el lunes recibimos 62 telegramas de suspensión por 75 días y la notificación del cierre definitivo”.

Fernández también informó que “Molinos Lagomarsino tiene tres establecimientos más en la Provincia de Buenos Aires: Avellaneda, Navarro y Carlos Casares”, a la vez que se lamentó por “las 62 familias que quedaron en la calle, porque esta suspensión es sin goce de sueldo”.

“Hoy nos vamos a quedar acá, hasta que la empresa cambie de opinión o la Municipalidad nos ayude a revertir la situación”, concluyó.