Se habló de una pelea sin retorno entre el Intendente y la elegida para comandar la lista de precandidatos a concejales por Cambiemos. También de masivos pedidos de renuncia acorde al descontento del Jefe Comunal por no poder ubicar a gente de su confianza en puestos de jerarquía. Sin embargo, más allá de los rumores, Arroyo no le pidió a Baragiola que dé un paso al costado.
Se viven momentos de tensión en el gobierno del intendente Carlos Fernando Arroyo, 48 horas después del cierre de listas rumbo a las PASO. La presencia de tres radicales entre los primeros cinco de la boleta y el desplazamiento hacia el sexto lugar del yerno del Jefe Comunal, Mauricio Loria, generaron el primero de los cortocircuitos entre el hombre del piloto azul y Vilma Baragiola, amén de la falta de apoyo provincial hacia los nombres de confianza de Arroyo (el otro que sonaba fuerza para ocupar un puesto de preponderancia era el actual secretario del Concejo Deliberante, Juan Tonto).
Sin embargo, entre este domingo y lunes, ya con la lista de Cambiemos definida y presentada en la ciudad de La Plata, fueron otras las novedades que comenzaron a girar en torno al espacio político que gobierna en General Pueyrredon.
Habida cuenta del descontento del Intendente por no poder meter a Loria y Tonto entre los primeros cinco puestos, y la fuerte presencia radical (amén de Vilma encabezando la lista, Ariel Martínez Bordaisco –de la confianza del diputado provincial Maximiliano Abad- y Cristina Coria –del riñón baragiolista– se quedaron con el cuarto y quinto lugar), trascendió que Arroyo le habría pedido la renuncia a la actual Secretaria de Desarrollo Social, algo que fue desmentido extraoficialmente por el secretario de Gobierno, Alejandro Vicente, y otras fuentes consultadas por Cazador de Noticias.
En el medio de tantas elucubraciones, también aparecieron los interesados en probarse el traje de Vilma (en caso de dejar Desarrollo Social). Dicho sea de paso, en los últimos días había empezado a tomar fuerza el rumor de un posible rompimiento en el Gabinete Municipal, ya que desde la esquina de la manzana de las sombras (léase La Font D’Oro) un dirigente asociado con el histórico partido se postulaba para reemplazarla. ¿Qué sabía ese ladero? ¿Ya olfateaba algún posible movimiento de piezas o tenía información concreta?
Mientras tanto, dos concejales radicales salieron a hablar en las últimas. Cristina Coria le confesó a Cazador de Noticias que el nombramiento de la funcionaria municipal fue “más un sacrificio que un premio”, habida cuenta del deseo –puntualmente de la edil- de que peleara un puesto en la cámara de senadores bonaerense.
El otro que se hizo escuchar fue su par Mario Rodríguez –actual presidente del Comité Radical-, quien aseguró la “gobernabilidad” para con la administración de Arroyo en caso de renuncias masivas. Pese a haberse sentido “traicionado” al quedar afuera de toda discusión en el armado de listas, su sentencia tiene una explicación lógica.
Ante el rumor de renuncia (por decisión propia o ajena) de Baragiola, ésta iría de la mano de la salida de una veintena de funcionarios radicales que responden a la Secretaria de Desarrollo Social. El concejal, hoy por hoy en la vereda de enfrente de quien encabezará la lista, buscaría en todo caso poner a los suyos en los lugares vacantes.
Tras la definición de la lista de Cambiemos, no caben dudas que los grandes ganadores fueron Maximiliano Abad y Vilma Baragiola. El gran perdedor, Carlos Fernando Arroyo, reaparecerá este martes en la Municipalidad después de un fin de semana encerrado en su casa (producto de un fuerte estado gripal). Para poner paños fríos a la situación, continuar con su agenda diaria o dar un cambio de timón contundente.