“La llegada del tren nos permite tener una conectividad que se había perdido en los últimos años. Esto es una muestra de lo que se puede hacer si se trabaja en conjunto entre municipio, Nación y Provincia”, manifestó el Intendente.
“Este es el Estado, haciendo lo que tiene que hacer”, dijo Arroyo. “Acá se ha hecho una gran inversión pero por sobre todas las cosas, un trabajo serio y responsable, esto hay que resaltar y remarcar” agregó.
“Calculen ustedes lo que significa esta obra que permite que el tren regrese a la ciudad. Se construyó un puente nuevo de 250 metros de longitud y se renovaron 208 kilómetros de vías, lo que incluyó la colocación de rieles, 250.000 durmientes de hormigón y 600.000 toneladas de balasto” puntualizó el intendente Arroyo más adelante.
Con una inversión de 1.300 millones de pesos, el tren entre Plaza Constitución y Mar del Plata vuelve a circular con una formación diaria que pasará por 12 localidades, luego de dos años de permanecido sin actividad debido del derrumbe de un puente sobre el río Salado.
Habrá un tren que saldrá todos los días desde Constitución a Mar del Plata a las 15.13, y otro de vuelta desde Mar del Plata a Constitución a las 23.59. El recorrido incluirá paradas intermedias en Brandsen, Chascomús, Lezama, Castelli, Sevigne, Dolores, General Guido, Maipú, Las Armas, Pirán, Vidal y Vivoratá.
PEDIDO DEL INTENDENTE ARROYO
A poco tiempo de asumir como intendente, en enero del año pasado, Arroyo le solicitó al entonces ministro de Infraestructura, Servicios Públicos y Transporte de la provincia de Buenos Aires, Edgardo Cenzón, que intervenga ante Ferrobaires para recuperar el servicio de tren entre Mar del Plata y Constitución. El mismo pedido fue elevado al ministro Guillermo Dietrich. En abril, en un encuentro con la gobernadora Vidal, el Intendente dialogó sobre diversos temas de interés para la ciudad, entre ellos, el regreso del tren a la ciudad.
Durante el mismo mes, el jefe comunal volvió a reiterar su pedio ante el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, durante una reunión en CABA. “El tren es otro de los ejes, pero en su momento ya me ocupé de esto hablando con Nación, investigando la cuestión del Río Salado y durmientes. Un poco en silencio, la administración nacional ha hecho un gran trabajo porque se han cambiado miles de durmientes y yo mismo vi trabajando a las máquinas”, señaló Arroyo en esa oportunidad.
CONSTRUCCIÓN DE UN PUENTE NUEVO EN EL RIO SALADO
Las obras, que estuvieron a cargo de Trenes Argentinos Infraestructura, incluyeron la construcción de un puente nuevo sobre el Río Salado de 250 metros de longitud, con una estructura formada por 10 segmentos de hormigón de 25 metros cada uno. Se renovaron 208 kilómetros de vías, lo que incluyó la colocación de rieles, 250.000 durmientes de hormigón y 600.000 toneladas de balasto, que son las piedras que actúan de base de los rieles y durmientes.
Con este nuevo puente de hormigón armado, apoyado sobre columnas enterradas a más de 20 metros de profundidad, se reemplazó una estructura de hierro centenaria que estaba apoyada sobre columnas de ladrillos y que quedó dañada tras una crecida del Río Salado en 2015. Sobre la nueva estructura de hormigón se colocó luego la estructura de vías, compuesta por balasto, rieles y durmientes. A diferencia del puente anterior, este es más resistente y requiere menor mantenimiento, y además se adapta al régimen de crecidas del Río Salado y de lluvias previstas.