Hay al menos 44 edificios destruidos, escapes de gas y heridos en la capital del país.
Un fuerte terremoto de 7,1 grados de magnitud sacudió este martes fuertemente la capital mexicana y causó al menos 139 muertos, según la cifra provisional ofrecida por las autoridades, un saldo que podría aumentar dadas las altas probabilidades de que haya más personas atrapadas bajo los edificios derruidos.
Se produjeron muchas escenas de pánico justo cuando se cumplen 32 años del poderoso terremoto que dejó miles de muertes en la Ciudad de México.
Mientras tanto, en la Ciudad de México hay un total de 44 edificios destruidos y se teme que haya personas atrapadas. Los equipos de rescate y los vecinos trabajan para rescatar a muchas personas que se temen se encuentran bajo los escombros.
El coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, ha confirmado que hasta el momento hay 248 fallecidos: 64 en Morelos, 36 en la capital del país, 29 en Puebla, nueve en el Estado de México y uno en Guerrero, aunque esta cifra no es definitiva y podría variar en las próximas horas.
Los equipos de emergencia se esfuerzan por rescatar a las personas atrapadas en los edificios derrumbados en Ciudad de México, en medio de un caos circulatorio que dificulta el paso de ambulancias y por el temor a que se produzcan nuevos temblores. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) informó de que 3,8 millones de clientes carecen de suministro de energía eléctrica debido al movimiento telúrico.
El Servicio Sismológico Nacional (SSN) detalló que, según el reporte preliminar, se trató de un solo evento sísmico en los límites de Morelos y Puebla. El movimiento telúrico fue de magnitud 7,1 y su epicentro, registrado a las 13.14 hora local (18.14 GMT), se localizó a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, en el central estado de Morelos, a una profundidad de 57 kilómetros.
El sismo derrumbó al menos una treintena de edificios en distintas zonas de la Ciudad de México, como las colonias Condesa, Del Valle, Narvarte, Centro, Coyoacán y Xochimilco, entre otras. El movimiento, que sacudió esta tarde fuertemente la capital mexicana, también causó numerosos cortes en el servicio eléctrico, fugas de gas e interrumpió el servicio de telefonía, así como el del Metro.
En el sur de la ciudad, en Coyoacán, la Iglesia de San Juan Bautista sufrió daños en una de sus torres y en Xochimilco se cayó la parroquia de San Bernardino. En esta zona un videoaficionado registró el fuerte movimiento del agua de los canales. Un ola gigante cruzó de lado a lado y removió las trajineras (embarcaciones tradicionales).
En todas las zonas afectadas hubo daños en edificios, algunos de los cuales se desplomaron, así como muros y fachadas de departamentos y edificios públicos en una capital donde aún se respira miedo.
Al poco de producirse el terremoto la ciudadanía que había salido a la calle para resguardarse del temblor se organizó para ayudar en las tareas de limpieza de escombros, cuya rapidez es vital a la hora de encontrar con vida a las personas que podrían estar atrapadas por la runa. En este sentido, las horas posteriores al sismo son críticas para los servicios de rescate. Sólo en Ciudad de México hay 20 millones de habitantes.
El temblor generó numerosas escenas de pánico en la capital de México solo dos horas después de que la ciudadanía saliera a las calles de todo el país en un simulacro conmemorativo del terremoto de 1985. De magnitud 8,1 fue el terremoto que asoló la Ciudad de México el 19 de septiembre de hace 21 años y dejó 10.000 muertos, según fuentes oficiales, cifra que la Coordinadora Única de Damnificados elevó a 45.000.