El pontífice se acercó especialmente a saludar al grupo de argentinas en la Plaza de San Pedro. Llevaban los tradicionales pañuelos blancos en sus cabezas, en el marco de la celebración del Día de la Madre.
Francisco saludó este domingo a un grupo de representantes de la organización defensora de los derechos humanos Madres de Plaza de Mayo en la plaza del Vaticano, donde las mujeres se congregaron tras un pedido cursado por la presidenta de la asociación, Hebe de Bonafini.
El pontífice se acercó especialmente a saludar al grupo de argentinas que llevaban los tradicionales pañuelos blancos en sus cabezas, en el marco de la celebración del Día de la Madre y de los 40 años de las Madres de Plaza de Mayo.
La asociación indicó que el papa realizó el saludo luego de la canonización del beato brasileño Mateus Moreira y destacó que Francisco “había invitado al grupo de mujeres” e italianos “que tenían previsto realizar una marcha en la Plaza San Pedro a que presenciaran la ceremonia desde la primera fila”.
La marcha había sido planificada por las Madres y un grupo de apoyo de Italia e incluso, según la asociación, su presidente Bonafini “le había escrito una carta al Papa para consultarle si esto era posible”.
“Francisco le respondió que sí, pero que dado que habría una ceremonia que implicaba ciertas reglas de seguridad, enviaría a un sacerdote a buscar al grupo de mujeres con pañuelos blancos para hacerlas ingresar y ubicarlas en la primera fila de la misa de canonización presidida por el Sumo Pontífice”, añadió la entidad en su página de Facebook.
Los manifestantes se congregaron en la plaza vaticana con un cartel con la leyenda “No pasarán”, uno de los lemas habituales de la asociación.