El parlamento desconoce al rey Felipe V de España y al Gobierno de Rajoy. El Gobierno central aprueba destituir a Puigdemont. Fueron 70 votos por el SI, 10 por el NO y 2 en blanco.
El Parlamento catalán aprobó este viernes una histórica resolución que proclama una República de Cataluña independiente y soberana, y el Senado español respondió de inmediato aprobando la intervención de las instituciones de la región, en una de las jornadas más dramáticas de una inédita disputa con final incierto.
"Hemos dado un paso por el que hemos luchado mucho. Ciudadanos de Cataluña, vienen horas que todos tendremos que mantener el pulso de este país, desde la paz", dijo el presidente catalán, Carles Puigdemont, luego de la votación, ante diputados y alcaldes secesionistas.
"Habrá que mantener el pulso desde el civismo y la paz. Alcaldes y diputados, está en nuestras manos fortalecer Cataluña como una vieja nación de Europa que siempre ha contestado a los retos desde la paz. Y sobre todo ser dignos. ¡Viva Cataluña!, agregó.
Más temprano, los diputados presentes en la sesión festejaron con vítores y abrazos luego de que la presidenta del Parlamento, Carme Forcadell, anunciara la aprobación de la resolución por 70 votos a favor, 10 en contra y dos abstenciones.
Los diputados opuestos a la independencia abandonaron el recinto antes de la votación en señal de protesta. La votación se realizó de manera secreta, con cada diputado depositando su voto en una urna, con el fin de evitar posibles consecuencias legales para aquellos que lo hicieron por el "Sí".
Esa decisión estuvo acompañada de fuerte reproches de la oposición, que recriminó a los independentistas que utilizaran esa "excusa" para no dar la cara ante la ciudadanía, a la que, aseguraron, "están llevando al precipicio".