La preocupación por las altas tasas de interés bancario, la presión tributaria y la inflación, fueron algunos de los aspectos a los que se refirieron representantes de entidades que conforman el Foro sectorial de la Construcción a nivel local. ´Este fue uno de los encuentros más convocantes del 7mo Congreso de Profesionales Inmobiliarios que acaba de concluir en la ciudad.

La lic. Candelaria Costa, de la Cámara Argentina de la Construcción; el arq. Leonardo Tamburini, del Centro de Constructores y anexos), el presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos Departamento Judicial Mar del Plata, Miguel Ángel Donsini, la representante de la Cámara de desarrolladores inmobiliarios, Florencia Miconi y el tesorero del Colegio de Arquitectos distrito IX Bruno Mazzini, analizaron diferentes aspectos relacionados con la Construcción, desde la óptica de cada una de las entidades representadas en un Foro que integran diez entidades de la ciudad. “Fue formalizado en 2014 –indicó el arq. Mazzini-, - y tiene como objetivo buscar coincidencias y entender la globalidad de las actividades, con una postura propositiva”.

“La carga tributaria es abismal”

A su turno, el titular del Colegio de Martilleros y Corredores de Mar del Plata, Miguel Donsini, reafirmó que “lo que se está vendiendo es usado, de cada diez operaciones, siete son de crédito y las tres restantes derivan de crédito porque el que está vendiendo generalmente compra, pero no está comprando nuevo. Acá hay un problema que es grave y que creo que es donde tenemos que poner el foco: la construcción es la industria sin chimenea que da más trabajo. Mar del Plata, una ciudad de 700.000 habitantes, tiene 150.000 personas que directa o indirectamente dependen de la construcción y a veces uno ve el desarrollador, veo a todas esas firmas y pienso en el sacrificio que ha tenido que hacer ese grupo familiar, porque en Mar del Plata las desarrolladoras son grupos familiares que hacen un trabajo intenso sin apoyo del gobierno ni apoyo financiero de los bancos en los últimos veinte años, entonces tenemos que tener un cambio estructural mental, dentro de la lógica, porque cuando uno empieza a escuchar y ve lo que se tiene que pagar, se da cuenta de que no le queda mucho. La carga tributaria es abismal. Y es un negocio que arranca y generalmente lleva tres, cuatro años y a veces más. Y encima se hace con capitales propios…

En cuanto a su sector específico, indicó que “estamos bien, esto recién empieza y hay que seguir trabajando, pero queremos lo nuevo, queremos que lo nuevo salga al mercado y se pueda hacer con crédito”, palabras que fueron recibidas con el fuerte aplauso del auditorio.

Indicó luego que “creo que los bancos perdieron la práctica, se demora terriblemente, estamos hablando de 120 días, teníamos inconvenientes, hicimos las notas, no podían entrar nuestros profesionales a la parte operativa. El primero que nos contestó fue el Banco Nación, creo que el Provincia va a hacer lo mismo, les hemos mandado notas las instituciones, porque esa demora es muy larga, pero creo que se va a ir agilizando. Vuelvo a repetir: el círculo se cierra cuando se empiece a construir. Es importante para el país que haya construcción nueva”.

Otro tema que se instaló en el debate, dada su relevancia en la actualidad, estuvo referido a los créditos hipotecarios. En este sentido, Florencia Miconi dijo que “lo que vemos el sector de Desarrolladores, por lo menos en esta parte del país, es que los créditos hipotecarios van todo al usado, pero no todavía en lo que es el pozo. Vemos que las tasas para desarrolladores son bastante altas y luego la otra línea, que es la línea para crédito en pozo, obliga al desarrollador a que esté destinado el 100 % a gente que compra mediante crédito bancario, ,es decir se podría vender a otras personas y no sólo eso sino que para iniciar el desarrollo tiene que estar el 100% preadjudicado a clientes del banco, entonces todavía es un poco complejo. Quizás sí lo que se ve es que el que vende su unidad usada mediante crédito bancario, que luego invierta el dinero en pozo.

Altos costos

En ese mismo orden de preocupación por los costos, el arquitecto Tamburini se refirió a un nuevo convenio “ que se ha firmado entre la Secretaría de Planeamiento de la Nación junto con todos los sectores de la construcción” y que “intenta de alguna manera generar incentivos a través de disminuciones en los ingresos brutos, en el no pago de factibilidades a través de los diferentes entes de servicio, esta es una primera manera de entrar y poder empezar a cambiar el paradigma de que solo construye el Estado a través de viviendas de clase media o Fonavi, el paradigma pasa por el hecho de generar a través de los desarrolladores, que sean ellos los que fomenten, desarrollen los dos emprendimientos. En la práctica, está un poco en el ejercicio de los profesionales, los desarrolladores y las empresas constructoras porque nosotros debemos hacer un click en cómo construimos”, señaló.

“Lo que hoy tenemos que empezar a trabajar es en esto de cambiar las tecnologías para construir. En la medida que podamos bajar la tecnología, llevarla realmente a un segmento de industrialización, se abaratarán los costos. Hoy, de alguna manera hay una visión de que el desarrollador pase a construir y no tanto el Instituto de la vivienda o el Fonavi. En ese aspecto lo vemos muy positivo. Pero estamos en un proceso inflacionario, que hace todo muy difícil”.

En este sentido, Florencia Miconi aclaró que “es importante hacer hincapié en que si bien es cierto que construimos caro, la calidad argentina de la construcción frente al resto de los países de la región se destaca. Eso es una realidad. Y luego lo que tenemos es una presión tributaria muy importante, Por ejemplo hoy para entregar un departamento tenés 10,5 de IVA, 4% de ingresos brutos, un punto entre tasa de seguridad e higiene y fondo de turismo, después tenés el iva que vas pagando durante el desarrollo, no se ajusta costo por inflación y tenés procesos de obra con desarrollos grandes que por ahí toman hasta entre tres y cuatro años…

APOYO DE CAMAÑO Y LAVAGNA A LA CLÁUSULA DE VALUACIÓN

Los diputados del Frente Renovador Graciela Camaño y Marco Lavagna, fueron parte del Congreso de los Martilleros.

Es que ambos, desde su bancada, vienen trabajando en dos leyes muy importantes para el sector, como lo son la de Mercado Financiero y muy especialmente, la de Alquileres.

Durante su intervención, los diputados dieron a conocer algunos de los cambios efectuados a la Ley de Alquileres enviada por el Senado. Entre otros, hacer constar la obligatoriedad de la intervención de un martillero en las operaciones. Y también –indicaron- “cambiamos la fórmula de ajuste de los alquileres, está puesto que el ajuste sea por inflación, que se pueda hacer anualmente, que se pueda hacer semestral si hay una inflación alta, le incorporamos lo que son las garantías sociales y esto luego de haberlos escuchado a ustedes, ya que tuvimos varias reuniones con representantes de los sectores. La idea fue trabajar sobre la ley que vino del Senado, porque claramente merecía tener muchos cambios. Nosotros la trabajamos con el oficialismo buscando darle más garantías al inquilino sin que esto signifique matar al sector de martilleros. El miércoles probablemente se trate en el Congreso”, concluyeron.

Por su parte, el titular del Colegio a nivel provincial, Carlos Hugo Esteban, afirmó que comprometió a ambos legisladores para que apoyaran un proyecto del sector, como lo es la cláusula de valuación, un requisito a cumplirse antes de la escrituración de una propiedad y que hoy no existe. “ El martillero y el corredor son los únicos que tienen los verdaderos valores de mercado- explicó Esteban. Entonces, antes de escriturar, habría que pedirle una tasación a un profesional nuestro, que diga cuánto vale la propiedad. Y después si el particular la compró en 50 pesos y la propiedad dice el profesional que vale 100, hay que felicitarlo porque hizo un muy buen negocio. Pero la escrituración tendrá que hacerse por 100. Y con una firma obligada. Eso no existe para nuestro sector pero sí existe para los automóviles: yo voy a hacer una transferencia de un auto usado y le llevo el boleto al Registro Automotor y digo “lo pagué 50.000 pesos”, pero allí me dicen “usted lo pagó 50.000 pero su auto vale 100.000 pesos señor, acá tiene la valuación”. Y esa es la valuación que nosotros queremos hacer. Esto ya lo tenemos pedido a la doctora Caamaño y lo comprometimos también al doctor Lavagna para que apoyen nuestro proyecto.

Cabe destacar que el 7º Congreso de Profesionales Inmobiliarios, fue organizado por el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de la Provincia de Buenos Aires y el anfitrión, el Colegio departamental Mar del Plata, conjuntamente con la firma SyG.