El diputado provincial Rodolfo Iriart planteó que la ciudad se encuentra ante un gran desafío: “pensar y debatir una nueva agenda urbana al servicio de la calidad de vida y la garantía de derechos vinculados al empleo, la seguridad, la movilidad, la salud, la protección ambiental y la superación de las desigualdades sociales”
El legislador consideró que "el fenómeno de la urbanización no es nuevo y mucho menos exclusivamente marplatense" y explicó que América Latina es la región más urbanizada del mundo, estimándose que para el año 2030 más de 600 millones de los 725 millones habitantes de la región vivirán en áreas urbanas.
Al mismo tiempo, señaló que "entre las ciudades que más crecen, están cobrando cada vez más protagonismo las ciudades de menos de 1 millón de habitantes, las ciudades intermedias (por ejemplo Mar del Plata)". Y, según la ONU, esta tendencia se profundizará durante las próximas décadas, ya que estas ciudades están creciendo más rápidamente que los grandes centros urbanos.
En la actualidad, aproximadamente el 80% del PBI regional es generado en las zonas urbanas, lo que para el diputado Iriart "demuestra que las ciudades tienen un rol cada vez más central en el comercio, la inversión y la economía de los países".
"Mar del Plata se encuentra dentro de estas ciudades con alto potencial de crecimiento urbano y sustentable, por lo que su planificación y proyección resulta fundamental para poder alcanzar estos objetivos", destacó.
"Uno de los principales problemas a tener en cuenta en esta planificación es el de la desigualdad", sostuvo. Y agregó: "es innegable que nuestra ciudad no solo se caracteriza por el puerto o por ser el polo turístico más importante del país sino también por ser la ciudad con los niveles más altos de desocupación y subocupación, trabajo precario, y un creciente desarrollo de la zona periférica de la ciudad -mucho menos urbanizada que la zona del centro- de la mano de un creciente incremento poblacional".
Dicha desigualdad, de acuerdo al análisis de Iriart, "no solo se caracteriza por la concentración del ingreso y los recursos monetarios, sino que también está estrechamente asociada con el acceso inequitativo a servicios, recursos, espacios y oportunidades, situación que a su vez genera dinámicas de marginalización, exclusión y segregación espacial".
Es así como "la ciudad se divide en territorios con fronteras invisibles, que limitan el desarrollo y afectan la productividad y el crecimiento sustentable de la ciudad", expresó.
“A nivel local, las ciudades tienen cada vez mayor capacidad de acción para incidir en la agenda de la equidad y el desarrollo sostenible, y contribuir de esta forma a la reducción de desigualdades”, precisó Iriart.
Para cerrar, Iriart dijo: "El desafío está planteado y todos los marplatenses somos conscientes del potencial que tenemos como ciudad. Nación, provincia y municipio son tres instancias que deben trabajar en conjunto para poder crear algo más grande que lo que ya tenemos. Sin dudas cada uno tiene una responsabilidad y recursos, pero la potencialidad del diálogo y del trabajo en equipo es esa: cada uno, desde su lugar, abonar a la construcción de una planificación a futuro".