La Asamblea General de Naciones Unidas lo aprobó con 128 votos contra nueve y 35 abstenciones.
Pese a repetidas amenazas de los Estados Unidos, la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución no vinculante que rechaza el reconocimiento que hizo el presidente norteamericano, Donald Trump, de Jerusalén como la capital de Israel.
La Argentina se abstuvo, pese a que en 2010 el Estado reconoció al Estado de Palestina "dentro de las fronteras definidas en 1967", lo que significa en los territorios de Cisjordania, la Franja de Gaza y la parte oriental de Jerusalén.
La votación de este jueves, una victoria para los palestinos, se dio por un margen significativamente menor al que esperaban sus promotores, ya que se pronosticaban hasta 150 votos por el "sí". Cabe notar que 21 países estuvieron ausentes.
En ese sentido fue una victoria para Washington, ya que la amenaza del presidente Donald Trump de negar fondos a los países que se oponen a su decisión tuvo su efecto.
La sesión, convocada por los países árabes, se realizó tres días después de que Washington hiciera caer con su voto una resolución similar en el Consejo de Seguridad, donde tiene derecho a veto.
En la Asamblea General, en cambio, están todos los países representados, cada uno tiene un voto y ninguno puede vetar. Sin embargo, las resoluciones que emana de ese cuerpo no son vinculantes.
Ayer, en la víspera de la sesión, Trump se quejó de la ONU, organismo al que ya durante la campaña política, en 2016, se había referido como "un club de gente que se junta, habla y la pasa bien". "Toman cientos de millones de dólares e incluso miles de millones de dólares y luego votan contra nosotros. Bien, estaremos observando esos votos", amenazó.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó su rechazo al voto en la Asamblea General de la ONU, a la que se refirió como la "casa de las mentiras".