El conjunto de Mauricio Giganti enfrentó este jueves a Instituto de Córdoba y mostró una mejor versión que la que había tenido el martes ante Quilmes, que ya había superado a la primera prueba frente a San Martín de San Juan.
Con la posesión de la pelota como principal característica y mayor poder ofensivo, el "Torito" igualó 1 a 1 con la "Gloria". Con un grupo conformado por habituales suplentes y muchos juveniles, se va a Lincoln para enfrentar el viernes a las 21.30 a Rivadavia.
Otra vez se fue conforme Giganti. Y nada tiene que ver el empate final, luego de lo que habían sido las derrotas anteriores. Sí, lo que le dio satisfacción al entrenador es que su equipo cada vez se acerca más a lo que él pretende, volvió a ser dominador ante un rival de una categoría superior a partir de la tenencia de pelota, por tercer partido consecutivo con Pablo Saucedo como estratega, recibiendo cerca de César Cocchi y, a partir de ahí, empezando a jugar con los hombres de ataque. A diferencia de los choques anteriores, esta vez tuvieron más participación Joaquín Susvielles y Wilson Albarracín, que llevaron zozobras en varias oportunidades a Lucas Hoyos.
Sin embargo, un mal que lo aquejó en la primera fase del Federal A y que hay que bajar, es que le llegan poco y le convierten. Instituto casi no había inquietado a Juan Francisco Rago cuando se puso en ventaja. Se equivocó la defensa en la salida, tocaron adentro para Braida y el mediocampista derecho definió en soledad, con Paulucci parado sobre la línea sin nada que hacer.
En el complemento, nuevamente tomó la iniciativa el "torito" y fue en busca de la igualdad, que llegó a los 5' tras una buena jugada colectiva y la aparición de Leonardo Verón para sellar el 1 a 1. En la recta final, el calor se hizo sentir y no abundaron las situaciones de gol, aunque lo más claro estuvo en los pies de Albarracín que probó de la medialuna y su remate se elevó más de la cuenta.
En ese encuentro que se dividió en un tiempo de 45' y otro de 25', Giganti dispuso a: Juan Francisco Rago; Matías Caro, Federico Paulucci, Matías Vigano y Tomás Mantia; César Cocchi; Marcos Litre, Pablo Saucedo y Leonardo Verón; Joaquín Susvielles y Wilson Albarracín.
Por el lado de Instituto, Darío Franco paró a: Lucas Hoyos; Bonacorzo, Aguirre, López y Goicochea; Braida, Antonio y Endrizzi; Garro; Molina y Bailone.
Luego jugaron un partido los juveniles de Alvarado ante el equipo suplente de Instituto. Más allá del resultado (fue derrota 3 a 0 en dos tiempos de 30'), fue una buena experiencia para muchos de los chicos que están haciendo sus primeras armas en Primera División, con un roce diferente y que los ayuda a crecer y seguir mejorando.
A Lincoln con un mix
Tal como lo había anunciado a finales de 2017, la idea de Mauricio Giganti era utilizar la serie de Copa Argentina para darle rodaje a los que no tuvieron tantos minutos en el primer semestre y empezar a foguear a chicos de la Primera Local que pueden ser utilizados en cualquier momento para el Federal. Por eso, viajará a Lincoln con un mix para visitar el viernes a las 21.30 a Rivadavia, por la ida de la primera fase eliminatoria.
Más allá de que viajan algunos jugadores que habitualmente son titulares, la idea es que ocupen un lugar en el banco de suplentes y sean utilizados en caso de ser necesario. El único que estará seguro desde el arranque, es Martín Palisi, el capitán que debe una fecha de suspensión y no podrá jugar en el debut ante Desamparados de San Juan. En el arco, al igual que en la última jornada de la Zona 1, estará Matías Quinteros.
Los 18 jugadores que integrarán la delegación que van a encabezar el presidente Pablo Mirón y el vice primero Emiliano Montes, son: los arqueros Quinteros y Pablo Morata; los defensores Agustín Arias, Martín Quiles, Matías Vigano, Mauro Castro, Gastón Martínez y Emanuel Urquiza; los mediocampistas Juan Ignacio Alves, Palisi, Francisco Molina, Ezequiel Ceballos, Gonzalo Lucero, Ezequiel Riera e Ignacio Caamaño; y los delanteros Jonathan La Rosa, Nicolás Mollo y Damián Sotelo.
Foto: Romina Roosé / Prensa Alvarado