El secretario general del Sindicato de Vialidad Nacional de Buenos Aires, Fabián Catanzaro,denuncio que se ven obligados a levantar las escuelas y la medida “alcanza a 300 docentes y 1200 alumnos que asisten a las escuelas, repartidas en los distritos de Caba, Santa Fé, Chubut, Tucumán y Santa Cruz”.
Las materias que se cursaban están orientadas al trabajo en la obra pública, siendo de importancia por su especificidad y de gran valía y un fuerte aporte a la ingeniería civil.
Los conocimientos de los cuales se nutren los alumnos no se dictan en ningún otro establecimiento. Los egresados -que superan el centenar en cada promoción- obtienen un título oficial e inmediatamente ingresan al mercado laboral aportando técnicos calificados para la industria vial.
El cierre de las Escuelas se da en el marco del proceso de desguace de la Dirección Nacional de Vialidad a partir de la firma de Mauricio Macri del Decreto 794/17, con el que creó Corredores Viales S.A. y que estará facultado con las mismas funciones que Vialidad, pero con un enorme potencial para generar grandes negocios para los privados
Fabián Catanzaro explicó en forma detallada y minuciosa como fue el nacimiento de las escuelas técnicas desde 1947 y de como tienen que resistir los embates “del neoliberalismo que se instaló a partir del advenimiento de la adminsitración Macri”.
Desde el año pasado la preocupación de los trabajadores de Vialidad Nacional tras la firma del decreto 794/2017 en el cual se puede leer que Macri creó la empresa Corredores Viales S.A., con idénticas atribuciones a las de la dirección oficial.
Cabe consignar que el principal accionista de la sociedad anónima será el Ministerio de Transporte, con un 51 por ciento de las acciones, mientras que el restante 49 le corresponderá a la Dirección Nacional de Vialidad. No obstante, en el escrito queda estipulado que“en caso que el interés público lo requiera podrán participar de la sociedad personas de carácter privado a través de los procedimientos de selección correspondientes”, lo cual implica que las acciones pueden ser vendidas a privados.
Para perfeccionar la impunidad y responsabilidad legal de la sociedad anónima el Decreto presidencial “estableció que la nueva empresa queda al margen de las regulaciones y controles estatales de licitaciones y contratos”, señaló Catanzaro.