Los futbolistas mantuvieron una reunión con el presidente de la AFA, Claudio 'Chiqui' Tapia para mostrarle su negativa ante la disputa del partido contra Israel por miedo a las protestas que se pueden producir en el estadio y en las inmediaciones.
Camisetas argentinas aparecieron este martes teñidas de sangre en las afueras del predio del Barcelona donde entrenó la Selección y se acrecentó el temor por la presentación del equipo de Jorge Sampaoli en Jerusalén, donde debía presentarse el sábado ante Israel.
Finalmente no ocurrirá. El juego quedó cancelado oficialmente este martes.
La protesta en apoyo al Estado Palestino, más el pedido de distintas organizaciones e incluso de la Asociación del Fútbol de dicho país que solicitó a los argentinos que no visiten Israel, terminó dando resultados.
El compromiso se llevaría a cabo más adelante, sin riesgos de hacerlo a pocos días del Mundial y en un momento de extrema tensión política.