El prelado estuvo acompañado en el acto de apertura por el obispo de Lomas de Zamora y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (Cepas), monseñor Jorge Lugones SJ; el obispo de Mar del Plata, monseñor Gabriel Mestre. También participaron la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal; la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley; el intendente de General Pueyrredón, Carlos Fernando Arroyo y el secretario General de Luz y Fuerza, Guillermo Moser.

Arroyo agradeció la realización de la Semana Social en la ciudad, y destacó a la educación como herramienta para resolver la mayoría de las problemáticas de nuestra sociedad, mientras que monseñor Mestre expresó estar muy contento de ser el pastor de esta diócesis que recibe un encuentro tan importante y tan tradicional.

“Tenemos una honda preocupación por el momento en que vive la Patria. El ajuste no lo tienen que pagar los pobres”, expresó monseñor Ojea.

“Los obispos tenemos una honda preocupación por el momento en que vive la Patria”, sostuvo, y advirtió: “El nivel de inequidad es enorme y se acentúa cada vez más".

“En el país del Papa se escamotea su pensamiento, aunque se hable demasiado sobre él y muchos se crean dueños de interpretar sus intenciones”, manifestó al referenciar uno de los últimos documentos aprobados por el pontífice que presenta nuevas directivas éticas ante la economía financiera que ha producido abusos y crisis sistémicas.

Monseñor Ojea pidió: “Escuchemos el grito del pobre y aprendamos de él, defendamos la vida y reconstruyamos el sentido de nuestro patria”.

"Nos merecemos una Argentina más equitativa"

La ministra Stanley reconoció la responsabilidad y la oportunidad como gobierno de construir un país más justo, al afirmar: “Nos merecemos una Argentina más equitativa”.

“El diálogo no puede quedarse en un espacio de escucha sino en hechos concretos”, expresó Vidal y añadió: “Me gustaría decir que estamos en pasos más avanzados pero lo bueno es que empezamos. Es un momento difícil pero estamos en el mejor camino posible”.

La mandataria provincial afirmó que entiende el gobernar como un hacer y estar, y señaló que se trabaja en lo urgente, “atendiendo a los caídos, pero sin dejar de atender lo importante, como los igualadores sociales, de la salud y el trabajo”.

Por último, Vidal resaltó “la importancia de los valores, los que estamos aquí compartimos la misma idea de la visión de Dios y desde allí debemos dialogar y construir juntos”.

“Hay un número importante de indigentes que no tiene chances”

Monseñor Lugones cerró el acto de apertura destacando la participación federal de todos los reunidos. “Realmente los problemas son acuciantes, en esta Semana Social trataremos el trabajo esclavo, infantil, y también el de los indigentes. Hablamos de pobres, pero tenemos un número importante de indigentes que no tiene chance, esto nos duele”, aseveró.

“Al hacer y al estar, hay que agregar el sentir, la sensibilidad cooperativa”, señaló Lugones y más adelante destacó “si no apostamos a la familia estamos fritos y estamos atentando contra la familia con políticas como el divorcio y el aborto”. “Debemos alentar a una unidad de trabajo interinstitucional, pero cuando esto no alcanza es imperativo que el estado se haga cargo de las necesidades prioritarias”.

“Tenemos esperanza, esperanza que queremos construir con los jóvenes, pero se necesitan recursos ya que ellos quieren abrirse camino, salir adelante. Sin justicia social va a ser muy difícil llegar a la paz social. Construimos cárceles pero no habilitamos hospitales”, señaló el presidente de la Cepas y concluyó: “Consolar y acompañar van unidos a la creatividad y a la inversión, ya que la realidad se nos muestra con pymes cerradas y trabajos suspendidos”.