Motiva dicha solicitud la merma que han sufrido en sus haberes a partir de la última modificación en la movilidad jubilatoria, la alta inflación en el país y su traslado a los precios, fundamentalmente de alimentos y remedios, con graves consecuencias para el sector de jubilados y pensionados.

"Los legisladores de mi partido, la Unión Cívica Radical, deberían hacer pública esta demanda de que el bono de fin de año sea cobrado por sectores que claramente han sido perjudicados, debido a las modificaciones en sus haberes votadas por ellos en el Congreso Nacional casi un año atrás, para que recuperen un poco de ese poder adquisitivo perdido", expresó el edil alfonsinista.

Los jubilados y pensionados cerrarán el 2018 con un retroceso de, por lo menos, 20 puntos porcentuales en sus haberes, lo que les configura un escenario muy complejo en medio de la crisis económica con alta inflación. El defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, expresó recientemente: "Los jubilados y pensionados han perdido en este último año, respecto a la canasta básica, en forma muy significativa".

Según las proyecciones oficiales del Ministerio de Hacienda sobre las que se realizó el ajuste fiscal, la Argentina cerrará el 2018 con una inflación promedio del 42%. Consultores privados y analistas económicos ubican ese porcentual cercano al 45%.

La inflación registrada en el año muestra una aceleración respecto de los meses previos, según distintas estimaciones privadas. Éstas indican un fuerte traspaso a precios de la devaluación del peso, lo que motivó un recalentamiento de la inflación general.

En ese contexto, el vicejefe de Gabinete, Andrés Ibarra, y el titular de ANSES, Emilio Basavilbaso, por órdenes expresas del Presidente Mauricio Macri, anunciaron que los jubilados y pensionados no percibirán el bono de fin de año.

Rodríguez aclaró que Mar del Plata cuenta con una alta composición poblacional de adultos mayores, muchos de ellos originarios de otras localidades, los que una vez alcanzada la condición de jubilados, deciden trasladarse y radicarse allí, quienes se ven impactados por la inflación, el traslado a los precios y la merma en la actualización de sus haberes jubilatorios, por lo que resulta imperioso que dispongan del bono de fin da año, garantizando de esa forma, una mayor cobertura a sus necesidades básicas alimentarias y en medicamentos.