Juró ante el Tribunal Superior de Justicia luego de que el Parlamento se negara a darle el poder al considerar ilegítima su reelección.
"Por el legado del pueblo, por Simón Bolívar, por nuestros pueblos originarios, por el legado del comandante Hugo Chávez, por los niños y las niñas de Venezuela", juró Maduro su periodo 2019/2025. Y agregó: "no daré descanso a mi brazo ni reposo a mi alma", en su tarea por el país.
Antes de la jura formal, el titular del TSJ, Maikel Moreno, fundamentó la decisión de que la ceremonia se haga ante ese cuerpo y no ante la Asamblea Nacional (Parlamento) como marca la Constitución.
Los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Nicaragua, Daniel Ortega; Cuba, Miguel Díaz-Canel; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; y de Osetia del Sur, Anatoli Bibílov, fueron los jefes de Estado que presenciaron la ceremonia, junto a otra veintena de representantes internacionales.
De traje oscuro y corbata roja, acompañado por su esposa, Cilia Flores, Maduro saludó a su ingreso a las delegaciones extranjeras y respondió los gritos desde los palcos del recinto judicial.
"Hoy 10 de enero, voy a juramentarme con el pueblo, como Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, para seguir construyendo la patria socialista, por el camino invicto de nuestro Comandante Chávez", dijo Maduro horas antes de asunción, en una serie de mensajes en las redes sociales en los que anunció un "nuevo comienzo".
En paralelo al acto, la oposición lanzó críticas a través de la redes sociales, insistió en la idea de que el líder chavista "usurpa" la Presidencia en Venezuela y renovó el llamamiento a las fuerzas militares a que no reconozcan la investidura.
Maduro consiguió casi el 70 % de los votos en mayo pasado, en una contienda de la que no participó el grueso de la oposición por considerarla fraudulenta, entre otras razones, porque los principales líderes antichavistas fueron inhabilitados para competir.