Explicó Rodolfo Manino Iriart que de acuerdo a "la ley 10.559 el CUD se divide de acuerdo a tres ítems principales: el 58% responde a cuestiones demográficas (62% por población, 23% inversamente relacionado a la capacidad tributaria y el 15% según la superficie); el 37% a los efectores de salud; y el 5% según las funciones transferidas por la Provincia o Nación".

"La proporción destinada a los municipios es muy baja y responde a una situación histórica en la que tenían muchísimas menos funciones y de menor complejidad que en la actualidad", dijo Iriart, para quien "deberían suprimirse los fondos que operan por fuera de la ley de coparticipación, haciendo más claro el sistema de transferencias".

"Al observar los cambios del CUD en la gestión de María Eugenia Vidal al frente del Ejecutivo provincial, más del 50% de los distritos se han visto perjudicados con una reducción promedio anual del 3% y acumulando una pérdida equivalente a casi el 9% de los recursos de coparticipación municipal del primer año; pero es mucho peor al desagregarlo por distrito pues el rango de perjuicios llega al 20% anual (60% acumulado en el período). Mientras que, los municipios ganadores promedian aumentos del 3,6% anual (11% acumulado), esos valores ocultan que el rango de beneficio sube hasta el 26% anual o un 77% acumulado en 2017-2019", indicó.

Luego recordó: "esto que ocurre ahora es algo que advertimos que podía suceder y lo dije cuando se discutió el presupuesto provincial".

Iriart sostuvo que "hay que prever un croquis de transición, para que cada municipio no reciba en valores nominales menos recursos respecto al ejercicio precedente, como es el caso de Mar del Plata, respecto de 2018".

Por lo tanto, "una opción sería aplicar una nueva fórmula sólo sobre los incrementos, manteniendo fija la suma recibida por cada municipio el año anterior a la implementación del nuevo esquema", sugirió.