El jefe comunal avaló el regreso de un servicio militar obligatorio pero "sin armas en mano", abierto además a mujeres y también a discapacitados, a quienes dijo que una propuesta de este tipo "les daría un motivo para vivir, para hacer cosas".
"Eliminarlo fue el peor error, un verdadero desastre para el país motivada por un pésimo general que fue Balza (Martín, ex jefe del Ejército Argentino)", dijo el intendente Carlos Fernando Arroyo cuando se le consultó por el anunciado Servicio Cívico Voluntario en Valores.
Se debería reinstaurar aquel sistema-que fuera eliminado tras el asesinato del soldado Omar Carrasco, ocurrido en 1994 en Neuquén-pero con cambios que dejen de lado la formación militar y se acentúen sobre la educación y el aprendizaje de oficios.
"Ahora tenemos las consecuencias: una enorme juventud que en vez estar aprendiendo a cuidar la soberanía están en plazas drogándose y tomando cerveza", dijo Arroyo.
Puntualizó que un nuevo servicio militar deberá estar enfocado "como escuela de oficios y capacitación de vida".
Sobre este último aspecto destacó que los jóvenes allí,"aprenderían a tener orden, disciplina, ser higiénicos". "Gran parte de las escuelas no están dando orden y disciplina", respondió cuando se le preguntó si el sistema educativo tradicional no está aportando esos aspectos en la formación de niños y adolescentes.
"Es necesario levantarse a la misma hora, aprender a comer, bañarse todos los días, hacer una cama". disparó.
"Hoy hay un montón de los varones que no lo hacen", expresó Arroyo, e insistió que su propuesta debe ser "inclusiva", abierta también a mujeres y discapacitados pero sin portar armas.