El sondeo de Pulso Ciudadano, publicado en Biobio Chile, determinó que el 81,1% de los chilenos votará a favor de redactar una nueva Constitución en el plebiscito previsto para abril del año próximo.
Además, el 63,5% afirmó que optará por una Convención Constitucional cuyos miembros sean elegidos en su totalidad por el voto popular, mientras un 24,4% optará por una Convención Mixta Constitucional, formada por una mitad de asambleístas elegidos y la otra de parlamentarios en ejercicio.
La necesidad de "reducir la desigualdad entre los ciudadanos" fue la principal razón identificada por los chilenos como disparadora de la reforma constitucional, seguida de otros alicientes, como “mejorar la salud, la educación, las pensiones”, “terminar con la Constitución aprobada en dictadura”, buscar “mayor justicia social” y establecer "un nuevo pacto social entre ciudadanos y Estado”.
La reforma de la Constitución sancionada en 1980 fue una de las demandas surgidas del estallido social que empezó en Chile el pasado 18 de octubre, con multitudinarias manifestaciones, actos de violencia y represión que dejaron un resultado de una veintena de muertos y miles de heridos y detenidos.
Los líderes de los principales partidos políticos del país llegaron la semana pasada a un acuerdo para proponer un plebiscito a la población, que deberá pronunciarse en abril si está o no de acuerdo con la necesidad de reformar la Carta Magna.
También se le preguntará por el mecanismo de su preferencia, es decir si prefiere el sistema mixto o el que no incluye la participación de parlamentarios.