El fiscal general de Israel procesó hoy al primer ministro Benjamin Netanyahu por los presuntos delitos de fraude, cohecho y abuso de confianza en una serie de escándalos de corrupción, informó el Ministerio de Justicia en un comunicado.
El fiscal Avichai Mandelblit convocó a una conferencia de prensa para explicar su decisión, que promete sacudir la escena política israelí justo cuando el país parece encaminado a celebrar sus terceras elecciones en un año tras dos comicios sin un claro ganador.
El procesamiento asesta un fuerte golpe a Netanyahu y a su deseo de permanecer en el cargo, en el que ha estado más tiempo que cualquier otro jefe de gobierno en la historia de Israel.
Netanyahu enfrenta tres causas de corrupción, y las acusaciones en su contra incluyen haber aceptado cientos de miles de dólares en regalos como champagne y cigarros de un amigo multimillonario.
También está acusado de haber ofrecido un intercambio de favores a un diario así como usar su influencia para ayudar a un magnate de las telecomunicaciones a cambio de una cobertura favorable de su popular portal de noticias.
Netanyahu, que se convirtió en el primer jefe de gobierno israelí en ser procesado por cohecho o soborno, ha descrito las acusaciones como una caza de brujas y arremetido contra la prensa, la policía, los fiscales y todo el sistema judicial. La decisión llega en un momento tumultuoso para Israel.
Luego de dos elecciones inconclusas en septiembre y abril, tanto Netanyahu como su rival electoral, el ex jefe de las Fuerzas Armadas Benny Gantz, han fracasado en sendos intentos de formar gobierno. Es la primera vez en la historia que se da esta situación en Israel.