El ministro de Hacienda Hernán Lacunza reconoció este martes que la pobreza y la inflación “han empeorado” en la Argentina durante el gobierno de Mauricio Macri, aunque aclaró también que “hay otros números que son buenos” pero “menos visibles”.
“Si bien en términos de bienestar, si medimos la pobreza o la inflación, por ejemplo, son dos números que no han sido inferiores a los esperados, han empeorado concretamente, hay otros números que son buenos, que son menos visibles”, manifestó el titular de la cartera económica en declaraciones a radio Continental.
El funcionario nacional agregó que el crecimiento de la deuda es “fruto de los déficit del pasado” y planteó cuáles fueron, según su criterio, los grandes problemas que afrontó la administración de Macri para avanzar en la lucha contra la pobreza, uno de los objetivos que el presidente determinó como prioridad al asumir en 2015.
“La realidad es una combinación de distintos factores. Hay, entiendo, una subestimación inicial de la herencia”, evaluó y explicó que se cometió un error al tratar simultáneamente de “bajar la inflación, corregir el dólar atrasado y las tarifas al 10% del costo y crecer”.
Agregó que “hacer todo eso al mismo tiempo es muy difícil porque muchas de esas cosas son contrarias” y subrayó que lo correcto es definir “en el corto plazo” prioridades de acción ante esos “dilemas”.
“En segundo lugar hubo condiciones que empeoraron en el mundo o algo de mala suerte, la más crítica la sequía del año pasado. Y tercero, la más autocrítica, evidentemente la combinación de las herramientas fiscales y monetarias”, amplió.
Y sobre el último punto cuestionó “cómo se iba corrigiendo el déficit y cómo era el régimen cambiario y monetario con la tasa de interés no fue consistente” porque, opinó, “hubo una asincronía, por lo menos”.
Sin embargo, Lacunza reiteró que “los pilares que quedan para el próximo gobierno son saludables”.