Santiago Bal murió a los 83 años. El humorista había sido internado en una clínica de rehabilitación desde julio, pero su cuadro se fue complicando y tuvo que ser ingresado en una sala de terapia intensiva, donde se encontraba en coma farmacológico desde el domingo.
En los últimos meses, Bal había enfrentado varios problemas de salud derivados de un epoc y de una insuficiencia renal.
En julio, el actor había sido dado de alta, luego de permanecer 11 días internado por una importante inflamación en los tobillos originada por celulitis, pero desde entonces su situación fue muy vulnerable y necesitó de cuidados especiales.
El actor estuvo viviendo un tiempo en la casa de su exesposa, Carmen Barbieri, quien estuvo a su lado hasta el último momento. Si bien los artistas estaban separados desde hace ocho años, en el último tiempo sostenían una buena relación. "Me lo llevé a casa y estamos viviendo juntos porque no soy una mujer que abandona", había asegurado la actriz.
"Las broncas y los odios ya pasaron. Es el padre de mi hijo y soy la que está al pie del cañón, la que habla con el médico (...). Somos familia. Siento un gran cariño por Santiago", dijo Carmen días atrás.
Luego de presentarse durante la pasada temporada de verano junto con su exesposa y su hijo en la revista Nuevamente Juntos, en abril pasado el actor había informado que por sus problemas de salud de retiraba de los escenarios.