Un hombre fue detenido este miércoles como sospechoso del incendio que arrasó la distribuidora Torres y Liva de Mar del Plata, que afectó a unas 50 viviendas linderas, y la justicia investiga si está vinculado a una decena de ataques a medidores de luz denunciados recientemente por la empresa eléctrica Edea, informaron fuentes judiciales.

El sujeto fue aprehendido durante la madrugada de este miércoles en pleno centro de Mar del Plata por efectivos de la policía bonaerense, cuando merodeaba cerca de unos medidores de luz y en su poder tenía varios elementos que podrían provocar un incendio, manifestaron las mismas fuentes de la investigación.

El fiscal Juan Pablo Lódola, que investiga el siniestro que afectó a viviendas linderas y por el cual unas más de 100 personas se quedaron sin techo, deberá determinar si el hombre demorado tiene vinculación con el incendio de Torres y Liva y/o el resto de hechos denunciados por Edea.

Lódola se reunió con las autoridades de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI), para analizar las pruebas recabas hasta ahora en el expediente.

La investigación por el siniestro que destruyó la distribuidora ubicada en el macrocentro marplatense, continua avanzando sobre la hipótesis de un incendio originado intencionalmente, luego de que fueran hallados dos artefactos incendiarios caseros que provocaron una explosión en una caja medidora del inmueble afectado.

A partir de estos nuevos elementos, la investigación que en las primeras horas había quedado en manos de la Fiscalía de Delitos Culposos, a cargo de Rodolfo Moure, bajo la caratula de "Incendio culposo", pasó a la órbita de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6, conducida por el fiscal Lódola, con el cambio de figura a "Incendio doloso", delito que prevé una pena de 3 a 10 años de prisión.

Según explicó uno de los investigadores, los dispositivos hallados son "una especie de mecha con un trapo y un alambre", y la pesquisa apunta a determinar si existió"un móvil para un posible atentado" contra la distribuidora o "si el lugar fue elegido al azar".

El operativo de detención tuvo lugar en Santiago del Estero y Rivadavia donde se advirtió que el sospechoso, de 52 años, se acercaba a un medidor de luz con intenciones de prenderlo fuego. En su poder, el personal policial encontró encendedores, fósforos y gran cantidad de pilas.