El Gobierno nacional decisión extender el programa Ahora 12 en el marco de los esfuerzos para reactivar el consumo y también, mediante un acuerdo con el Banco Central (BCRA), prorrogó los beneficios para compensar el aumento en las cuotas de los tomadores de créditos hipotecarios ajustables por Unidades de Valor Adquisitivo (UVA).

En tanto el programa de financiamiento al consumo Ahora 12 continuará hasta el 31 de marzo “Se van a mantener las mismas condiciones del programa, pero se va a hacer hincapié en que el beneficio alcance a los productos de origen nacional”, explicaron en el entorno del ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas

En la Casa Rosada aclararon que dentro de “90 días se va a hacer una revisión” de ese esquema que ofrece la posibilidad de realizar consumos en 3, 6, 12 y 18 cuotas, porque, remarcan, se espera que en ese lapso se instale un "contexto de mejora de la macroeconomía”.

Paralelamente, la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa, acordó con el presidente del Central, Miguel Pesce, extender hasta por otros 30 días el plan tendiente a acudir a quienes posean un crédito hipotecario bajo el esquema de las UVA.

“El beneficio tenía fecha de vencimiento el 31 de diciembre, e implica el mantenimiento de la cuota al valor de agosto 2019”, detallaron.

Y adelantaron que “en vistas de lo establecido por el artículo 60 de la ley 27.541, se conformará una comisión para evaluar el desempeño y las consecuencias del sistema de préstamos ajustables por UVA para la adquisición de viviendas, sus consecuencias sociales y económicas, atendiendo al criterio del esfuerzo compartido entre acreedor y deudor”.

También se esperaban novedades respecto a qué sucederá con la excepción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para los alimentos de primera necesidad que estableció el anterior Gobierno en el marco de las medidas de alivio que dispuso frente a la devaluación que se produjo tras las elecciones primarias.

Según informaron fuentes oficiales a la agencia Télam, el Gobierno no prevé renovarla y de acuerdo con la estrategia del gabinete del presidente Alberto Fernández, las necesidades de los sectores más postergados serán atendidos mediante tarjetas de compra de alimentos, mientras que se mantiene el diálogo con las empresas formadoras de precios.