En la previa de las actividades programadas para este verano, el intendente se tomó un tiempo para felicitar a los profesionales que hace unos días rescataron una cola de gliptodonte que tiene una antigüedad de 3,3 millones de años

El intendente municipal Guillermo Montenegro recorrió las instalaciones del Museo Municipal de Ciencias Naturales Lorenzo Scaglia (avenida Libertad 3099, Plaza España), que a partir de este jueves reabrirá sus puertas al público con una destacada programación para la temporada de verano.

Tras la concreción de las múltiples obras de ampliación y remodelación, este espacio gestionado por la Secretaría de Cultura, a cargo de Carlos Balmaceda, podrá visitarse todos los días de 16.30 a 21, con una variada propuesta para toda la familia.

Montenegro aprovechó la oportunidad para dialogar con el personal que desarrolla tareas allí y se interiorizó de las refacciones que se hicieron. Al respecto, Victoria Podasa, licenciada en Ciencias Biológicas y trabajadora del museo, contó el encuentro. “El intendente llegó, saludó al personal del museo y a los trabajadores que están instalando el ascensor. Lo llevamos al laboratorio de Paleontología –que está abierto al público- y allí pudo ver cómo trabajamos en equipo. En ese lugar vio la cola del gliptodonte que recuperamos, se entusiasmó con las piezas que le mostramos y después pasamos al SUM, donde compartimos unos mates y pudimos conversar con las autoridades. Todo muy ameno”, aseguró.

Vale señalar que el jefe comunal aprovechó la oportunidad para felicitar a todo el equipo de trabajo que rescató una cola de gliptodonte que había sido encontrada por una persona en un balneario del sur. “La retiramos el 19 de diciembre en la UTF Rocío de Mar, conocida como Playa Paradise, en el sur de la ciudad. Está bastante entera, nos llevó aproximadamente de 6 a 7 horas, por la posición de las mareas”, explicó Podasa. “El resto se trajo al Museo, se va a limpiar y se procederá a cotejar si los restos pertenecen al mismo gliptodonte que encontrarnos en agosto de este año”, añadió.

“En aquel momento, apareció a 200 metros del lugar donde lo encontramos ahora. Podrí haberse desplazado. Vamos a ver qué nos determinan los especialistas. Tiene aproximadamente 3.3 millones de años de antigüedad, según los sedimentos que rodean a la muestra. Por eso es muy importante que la gente que encuentre estos fósiles en la barranca no los toquen, porque se puede perder información”, concluyó la profesional.

UN SINNÚMERO DE ACTIVIDADES PARA ESTE VERANO

Los lunes y martes de enero y febrero a las 20, las y los visitantes podrán participar de la actividad “Jugando con los científicos locos”, donde habrá experiencias para compartir en torno a los principios básicos de la ciencia desde un punto de vista entretenido y dinámico.

En tanto, los viernes y domingos en el mismo horario se presentará la obra de teatro “Oliverio, el viajero del tiempo”, y luego del primer fin de semana del año, también podrá visitarse el Planetario Móvil con funciones todos los días a las 17, 18 y 19 en el domo instalado en el parque del museo que ofrece una vista 360º de nuestro universo.

Cabe destacar que este espacio municipal vuelve a atender al público luego de que fuera totalmente renovado, a través de una ambiciosa obra de ampliación que inició a fines de 2017 y que llevó la superficie total del Museo de 370 a 757 metros cuadrados, con una refuncionalización completa de las áreas museológicas, la construcción de nuevos laboratorios y un salón de usos múltiples.

Además, se encuentra prácticamente lista la instalación del ascensor que garantizará el acceso universal -tal y como se indica en las legislaciones vigentes-, así como una terraza en el primer piso y nuevos espacios relacionados con las tareas de investigación, en un trabajo integral que involucró un presupuesto de 30 millones de pesos destinados exclusivamente al Museo, en la modalidad de inversión público-privada y en el marco general de la remodelación de la unidad turística de La Perla.

Concretamente, las obras dentro del Museo Lorenzo Scaglia incluyeron una refacción en el hall y los accesos, la instalación de una nueva pecera en la zona del acuario, donde además se incorporó un laboratorio completo. También se adecuó el taller de taxidermia, la sala de posición, la zona del taller de sala de exposiciones y los sanitarios públicos, la ampliación en sala de conferencias, la biblioteca y las áreas destinadas al personal.

Finalmente, también se ampliaron, mejoraron y reequiparon áreas como el laboratorio de paleontología, la sala de informática de paleontología, los depósitos de paleontología y mastozoología, así como los patios internos y externos, el estacionamiento y las nuevas terrazas, totalmente accesibles.