La empresa Bagley decidió paralizar durante dos semanas su planta ubicada en la provincia de Córdoba, por lo que suspenderá a 370 trabajadores a los que les pagará el 75 % de los salarios.
La compañía argumentó que tomó la decisión de cerrar la planta hasta el 3 de febrero debido a la acumulación de stock que le generó la caída de ventas por el menor consumo, a consecuencia de la recesión económica.
Bagley, que es administrada de forma conjunta por los gigantes Arcor y Danone, produce actualmente 17 marcas de galletitas, una de alfajor, un yogurt y una leche chocolatada, todos productos que comercializa en el mercado interno y exporta.
Con el objetivo de cumplir con su visión de ser la empresa Nº 1 de golosinas y galletas en Latinoamérica, y consolidar su participación en el mercado internacional, en 2005 Arcor concretó una asociación estratégica con el grupo francés Danone.
A través de este acuerdo se unificaron, bajo el gerenciamiento de Arcor, los negocios de galletas, alfajores y barras de cereal en Argentina, Brasil y Chile, por lo que se constituyó a Bagley Latinoamérica SA, una de las empresas de galletitas líderes de la región.
Pero desde 2019 el grupo empresario viene registrando inconvenientes producto de la recesión económica: en octubre le dio vacaciones por dos semanas a 2.500 empleados de las plantas de Colonia Caroya, en Córdoba, donde se producen distintos tipos de chocolate; Villa Mercedes, en San Luis y Salto, Buenos Aires, donde se hacen galletitas; y Reducción, Tucumán, que elabora caramelos duros, turrones de Navidad, jarabe de maíz y otros subproductos.
La empresa facturó 85.628,9 millones de pesos en 2018, pero tuvo pérdidas por 1.000 millones de pesos; en los primeros nueve meses del año pasado, tuvo un rojo de 2.160 millones de pesos; contabiliza una deuda de 500 millones de dólares que vence en 2023.