El papa Francisco pidió el fin de "las guerras, la producción y comercio de armas y los abortos", al celebrar en la Basílica de San Pedro la misa por la vigilia de Pascua durante la que convocó a no ceder a la "resignación" ante la pandemia de coronavirus.
"Acallemos los gritos de muerte, que terminen las guerras. Que se acabe la producción y el comercio de armas, porque necesitamos pan y no fusiles", convocó el pontífice durante su homilía, en una Basílica vacía por las medidas para frenar el coronavirus.
"Que cesen los abortos, que matan la vida inocente. Que se abra el corazón del que tiene, para llenar las manos vacías del que carece de lo necesario", reclamó Jorge Bergoglio.
"Por la emergencia sanitaria en vigencia", explicó el Vaticano, Francisco no realizó los tradicionales bautismos de la vigilia pascual
En ese sentido, en una referencia a la crisis actual por el coronavirus, Bergoglio pidió mantener la esperanza ante lo que denominó "la hora más oscura".
"No cedamos a la resignación, no depositemos la esperanza bajo una piedra", alentó.