La industria turística, que sostiene la economía de Orlando en el estado de Florida, continúa mostrando un impacto severo en el empleo y los ingresos de los trabajadores. Solo en esa ciudad acaban de ser despedidos o suspendidos 70.000 de los 75.000 empleados de los parques temáticos y hoteles de Disney. En total son unos 100.000 los funcionarios cesados.
La pandemia por el coronavirus que contagia la enfermedad COVID-19 golpea fuertemente al empleo y los ingresos por turismo en los principales destinos del mundo.
El impacto es particularmente severo en aquellas ciudades que dependen de sus atracciones turísticas, como Orlando, en EE UU.
Walt Disney World Resort tuvo que despedir, solo en Orlando, a 70.000 de sus 75.000 empleados. Estos trabajadores tendrán que depender del programa de Asistencia de Desempleo de Florida, que ha sido criticado por pagar solo US$ 275 por semana durante 12 semanas, cita TravelPulse.
Según NBC News, sin embargo, alrededor de 26.000 de estos trabajadores son miembros del gremio UNITE HERE, lo que significa que se inscribirán automáticamente en el programa de desempleo.
Por su parte, el presidente de Disney, Bob Iger, habría renunciado a su salario de US$ 3 millones por el resto del año, mientras que el presidente ejecutivo Bob Chapek supuestamente "renunciará a la mitad" de su salario base de US$ 2,5 millones para contribuir a mantener la salud de la firma durante este tiempo.
"La pandemia de COVID-19 está teniendo un impacto devastador en nuestro mundo con innumerables sufrimientos y pérdidas, y nos ha obligado a todos a hacer sacrificios", dijo la compañía Disney en un comunicado.