La Cámara Argentina de Productores Avícolas (Capia) sostuvo hoy que trabaja "para solucionar la compleja problemática del abastecimiento y el precio del huevo" ante el aumento registrado en la demanda desde que comenzó la cuarentena y responsabilizó a la cadena de comercialización por el aumento de precios al consumidor.
"Se está trabajando con las autoridades nacionales para encontrar una solución a la compleja problemática del abastecimiento y el precio del huevo y hace saber a la población que hoy los únicos beneficiarios de los incrementos registrados en los puntos de venta son quienes integran la cadena de comercialización, que operan como los verdaderos formadores de precios", expresó la entidad en un comunicado.
Al respecto, el presidente de la cámara empresaria, Javier Prida, indicó que “el productor no es el formador del precio al que se vende el huevo al consumidor en los 50.000 comercios alimenticios del país".
"Por el contrario, hoy el productor afronta el desafío de sostener el abastecimiento al 100%, con una demanda que creció en un 40%, con costos al alza, menos animales y la baja productividad de los actuales lotes”, agregó el dirigente empresarial.
Según la entidad, el precio pagado al productor no subió desde octubre de 2019 con un incremento de costos promedio de entre el 15% y el 20% a nivel nacional.
Así, la entidad indicó que desde el inicio de la cuarentena el precio de venta del cajón de 30 docenas a granel, tamaño grande, sin clasificar, es de $1500, y clasificado con envase primario y secundario es de $2.160, o sea $180 el maple.
A partir de esto, fuentes de Capia afirmaron que en la actualidad un productor obtiene una rentabilidad de entre $8 y $10 por maple, cuando el comercio minorista lo vende entre $250 a $330 el maple alcanzando ganancias que superan entre tres y cuatro lo que paga al productor.
En lo que respecta a los supermercado, aseguraron que los productores tienen un costo de producción de entre $85 y $90 por docena y la venden a pérdida a $75 la docena menos los descuentos.
"Luego, el consumidor paga $120-hasta 140-la docena, dejando un margen al supermercado del 66,66% por un producto que vende y cobra en 24 horas y lo paga a 60 días", adujo la entidad en un comunicado.
"Hace ya dos meses Capia viene manifestando publicamente su inquietud por lo que podría ser un eventual desnivel en la cadena en favor de los intermediarios y los comercios minoristas, que son los fijadores de precios para el público", concluyó el comunicado.