En el Día de la Bandera y aunque esté en vigencia el aislamiento social y obligatorio para prevenir el el contagio del coronavirus, Mar del Plata también fue parte del “banderazo y bocinazo nacional” convocado por redes sociales con el objetivo de repudiar la decisión del gobierno nacional de expropiar la empresa Vicentin. Pero además del reclamo vinculado con la situación de la empresa cerealera, también estuvieron presentes los cuestionamientos en relación a la vigencia de la cuarentena, el impacto económico del aislamiento, y el “atropello a los derechos constitucionales”.
La convocatoria fue a través de las diferentes redes sociales, y al igual que sucedió en distintos puntos del país, pasadas las 16 un nutrido grupo de manifestantes dio inicio al “banderazo y bocinazo nacional” en Mar del Plata, que no solo implicó una movilización en el monumento a San Martín con banderas celestes y blancas, sino también una caravana de autos por el centro de la ciudad.
Es que pese a la vigencia de la cuarentena y mientras la curva de casos a nivel nacional se mantiene en ascenso y los manifestantes decidieron salir a la calle algunos de ellos incluso lo hicieron sin medidas de protección, como barbijos para repudiar la decisión del gobierno nacional de expropiar la empresa Vicentin y mientras la polémica en torno a la situación de la compañía cerealera aumenta a nivel nacional.
"El Banderazo Nacional es un modo de decirle al gobierno que en Argentina no se puede hacer cualquier cosa", escribió en Twitter el diputado radical, Maximiliano Abad.
"Que la libertad, la propiedad privada, el respeto a los derechos de los demás son principios y valores que no se pueden vulnerar", remarcó el presidente del bloque de Juntos por el Cambio en la Cámara baja provincial.