El exsecretario de Néstor y Cristina Kirchner fue hallado muerto este sábado en horas de la mañana en una vivienda de El Calafate, luego de que cuatro detenidos por el caso de su desaparición confesaran ante la Justicia que lo habían asesinado.
El hallazgo se concretó en los fondos de una casa de esa localidad turística ubicada a unos 250 kilómetros de Río Gallegos, y de acuerdo a los primeros análisis realizados por los médicos forenses que revisaron el cuerpo presentaba golpes principalmente en la cabeza y un corte en el cuello.
El juez de instrucción Penal de Calafate, Carlos Narvarte, aseguró a la prensa que el cuerpo fue hallado envuelto en una sábana y que el hallazgo se logró gracias a la confesión de los cuatro detenidos.
Según los investigadores, todo comenzó el viernes al mediodía cuando se recibió una denuncia sobre la desaparición de Gutiérrez, quien no contestaba las llamadas y no había sido hallado en su domicilio.
De inmediato, por orden del juez Narvarte se realizaron las primeras diligencias en el domicilio del exsecretario de Cristina Kirchner en El Calafate, ubicado en Perkins y padre Alberto D´Agostini de la villa turística, el cual se hallaba totalmente revuelto.
Las fuentes judiciales consultadas por Télam aseguraron que en el lugar fue hallada una campera con manchas que podrían ser de sangre, precintos plásticos y manchas de sangre en distintos sectores de la casa.
"Había manchas por todos lados, pero parecían como si hubiesen querido limpiarlas", graficó uno de los investigadores que participaron del operativo en la vivienda.
Los pesquisas de la Policía de Santa Cruz determinaron luego que durante la noche previa Gutiérrez había sido visto con un joven de unos 20 años que era conocido suyo, por lo que los investigadores se dirigieron a su domicilio.
Ese joven, de apellido Saeta, quedó demorado y el juez ordenó de urgencia otros tres allanamientos durante la madrugada en los que fueron detenidos otros tres sospechosos, todos ellos de entre 20 y 25 años.
Tanto el primero de los detenidos como los otros tres confesaron más tarde ante la Justicia que habían estado con Gutiérrez y que lo habían atacado a golpes con intenciones de robarle dinero.
"Le pedían dinero y las claves de los cajeros automáticos", dijo uno de los pesquisas, quien reveló que "todos coincidieron en que primero lo atacaron en su propia casa y que luego lo llevaron hasta otra vivienda, donde lo terminaron matando".
El juez Narvarte confirmó en declaraciones a la prensa que el hallazgo del cadáver de Gutiérrez se logró "como consecuencia de la primer indagatoria recepcionada en el día de la fecha y en base al trabajo de Criminalística".
Según Narvarte, a raíz de ese testimonio de uno de los acusados, "surgió dónde podría estar (el cadáver)", ya que había dicho que estaba dentro de "la cabaña", aunque finalmente con "el trabajo de criminalística" dieron con el cuerpo en un sector del terreno.
Desde la noche de ayer, los operativos realizados en el marco de la causa fueron supervisados por el propio ministro de Seguridad de la provincia, Lisandro de la Torre.
El ahora empresario había sido procesado por el juez federal Claudio Bonadio en noviembre del año pasado, sin prisión preventiva, como supuesto coautor del delito de lavado de dinero en el marco de un expediente vinculado con la causa de los Cuadernos.