El satélite argentino de observación con microonadas SAOCOM 1B fue lanzado este domingo, a las 20:19, a bordo de un cohete Falcon 9, de la firma Space-X, desde la base de Cabo Cañaveral en Florida, Estados Unidos.
La primera etapa del cohete Falcon 9 se separó a los 2 minutos y 31 segundos del despegue, y fue recuperada en tierra para una próxima misión.
El satélite SAOCOM 1B se separó a los 14 minutos y 20 segundos del módulo de carga del cohete, se estabilizó en su órbita y abrió sus paneles solares.
El siguiente paso es el despliegue de la antena radar SAR, cada uno de los siete paneles, uno por vez, hasta desplegar completamente su estructura de 35 metros cuadrados.
Esa operación de despliegue de la antena terminará antes de pasadas 24 horas del lanzamiento.
El lanzamiento del satélite se había previsto originalmente para fines de julio, pero fue postergado el 25 de ese mes debido a decisiones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que coordina esa actividad.
La empresa SpaceX, proveedora del lanzador, fue la encargada de informar en aquel momento la reprogramación y, según indicó el Gobierno, se debió "al tiempo adicional que requirió la empresa para la puesta a punto del vehículo lanzador" debido al acercamiento con "otros lanzamientos previstos dese esa base".
En total, participaron 70 profesionales de estas instituciones, además de la empresa de capitales mixtos VENG y el Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicados (GEMA) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), que fue creado hace 25 años.
El proyecto fue pensado para ofrecer soluciones a problemáticas locales no satisfechas con información de otros satélites, a partir de requerimientos hechos por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional del Agua (INA) con el objetivo de atender necesidades de los sectores productivos y la gestión de emergencias naturales y catástrofes.