Investigadores de la Universidad de Edimburgo identificaron en el Reino Unido una nueva variante del SARS-CoV-2, que cuenta con algunas mutaciones potencialmente preocupantes.
La variante, llamada B.1.525, es aparentemente similar a la sudafricana, según reseñó la BBC de Londres, citada por la agencia de noticias Europa Press.
Hasta el momento, los investigadores de la Universidad de Edimburgo han encontrado 38 casos, dos de ellos en Gales y 36 en Inglaterra, y todos en muestras que se tomaron en diciembre de 2020.
La presencia de la cepa, que ya está siendo investigada, también se ha constatado en otros 10 países, incluidos Estados Unidos, Australia y Dinamarca.
Los científicos están trabajando para aprender más sobre la B1525, incluida la forma en que se propaga, qué efectos tiene y cómo reaccionan las vacunas sobre el mismo.
La mayor preocupación es que el virus está cambiando de maneras que podrían permitir que se propague fácilmente y se haga resistente a los antídotos ya desarrollados.
El profesor Andrew Hayward, experto en epidemiología en el University College de Londres, dijo que "afortunadamente, no parece estar extendiéndose más rápido que otras cepas, pero advirtió: "Con todas estas variantes, realmente necesitamos estar vigilando muy de cerca porque no sabemos lo que van a hacer".