Este lunes enmarcado en el confinamiento, la necesidad de afrontar el pago del local, las gabelas y los servicios básicos, impulsaron al peluquero Rubén Martínez a tomar la iniciativa de ubicar una silla en la acera de su comercio, ubicado Moreno y Santa Fe, para proseguir prestando servicio a sus clientes al aire libre, con todos los recaudos.
"Las medidas de precaución y los protocolos, los cumplo al pie de la letra y sigo trabajando. No creo estar fuera de la ley, trabajando al aire libre", aseveró el peluquero mientras realizaba un corte a un cliente.
Agregando que: "A todo el mundo le cae bien esto porque sabe que soy un tipo de trabajo y no me puedo dar el lujo de no trabajar. Nueve días sin trabajar es mucho. A mí no me regalan nada, los impuestos hay que pagarlos. En la medida que no perjudique a nadie, lo voy a seguir haciendo”.
Por su parte, el cliente opinó que “la gente necesita pagar el alquiler, la luz, el gas y demás. Acá se cortan los comercios indiscriminadamente pero el gobierno no dice: ´No hay que pagar los impuestos´. Por el contrario, los impuestos se deben seguir pagando y, entonces, terminan fundiéndose los comercios. Mar del Plata ya está en la desesperación, así que me parece perfecto que este señor corte el pelo en la vereda”.