Rodolfo Mingarini, un juez penal de Santa Fe, quedó en el centro de una polémica por el insólito argumento que utilizó para dejar en libertad a un hombre acusado de violación: el magistrado consideró “dudoso” considerar que fuera una situación no consentida por el hecho de que el imputado haya utilizado preservativo al momento del presunto ataque.
“Podemos pensar que habría habido relaciones forzadas, pero no puedo entender cómo si va a tener relaciones forzadas, empujándola, sometiéndola, se toma el tiempo... no puedo reconstruir cómo hace para colocarse el profiláctico y luego avanzar sobre el cuerpo de la víctima que según lo que está acá, se negaba. La verdad es que ahí es donde me genera la mayor duda”, sostuvo el juez santafesino.
Antes de ordenar la libertad del acusado y una serie de medidas restrictivas, Mingarini reafirmó: “Realmente es posible que haya habido esta relación no consentida, es posible, pero no tenemos suficiente evidencia para considerarla probable”.
Con esta decisión, Mingarini desestimó los exámenes de medicina legal que constataron las lesiones compatibles con una violación, como también el material biológico que se encontró en la escena del imputado e incluso las pericias psicológicas que se le hicieron a la víctima, las cuales avalaron su relato.
La víctima, una mujer oriunda del norte de la ciudad de Santa Fe, fue quien se presentó ante la policía y dijo que había sido violada. Al respecto, apuntó contra un albañil que en ese momento trabajaba en una obra frente a su casa, a quien, explicó, conocía “de vista”, pero no sabía su nombre.
En el momento en que supo que era buscado por la Justicia, sin embargo, el propio albañil decidió entregarse y ratificó la existencia de una supuesta “relación sexual” con la mujer. El hombre se defendió en ese momento alegando que él y la denunciante tenían una relación, lo cual la víctima negó rotundamente.
Sin embargo, no es la primera vez que el juez en cuestión se ve involucrado en una polémica. A través de un comunicado en las redes sociales, la mesa de Ni una menos Santa Fe recordó que en marzo del año pasado le otorgó la libertad a la espera del juicio a un hombre investigado por quemar a su pareja con agua hirviendo en Santo Tomé no dando lugar al pedido del MPA que solicitaba prisión preventiva por considerarlo autor de lesiones graves calificadas por el vínculo y por violencia de género.
En este sentido, expresaron: “Nosotras hemos denunciado a estos jueces una y otra vez. Estos que desconocen la normativa en relación a la violencia de género y a su deber como funcionarios judiciales de garantizar nuestra seguridad y la protección de nuestros derechos. Nos revictimizan, refuerzan estereotipos, mandatos, roles, conductas que perpetúan este delito y lo que es peor, otorgan impunidad a quienes lo cometen”.