En el marco de la declaración que brindó con la presencia de su abogada, Paula Oviedo, el jefe de seguridad de Mr. Jones, Fernando Romito, aseguró que no tuvo ninguna participación en el crimen del DJ Leonardo “Lele” Gatti, además de señalar que tenían su teléfono a disposición del cual podrían obtener información de importancia para reforzar su postura de inocencia.
A Romito se lo acusa del gravísimo cargo de “homicidio en ocasión de robo” según el artículo 165 del Código Penal y que prevé una pena que va de los 10 años a los 25 de prisión.
Según trascendidos, el jefe de seguridad de Mr. Jones fue señalado por un testigo de identidad reservada pero también, por referencias indirectas, por el otro detenido del caso, Luis Ytzcovich. Las pruebas en su contra serían por lo pronto testimoniales, al aguardo de otras diligencias como por ejemplo el análisis de telefonía celular.
Esa incriminación que fue lo suficientemente sólida para que la Justicia de Garantías librara una orden de detención en su contra sostiene que los autores del hecho habrían conseguido el dato a través de él. Ese dato era, nada menos, el horario en el que una o dos personas salían los sábados a la madrugada con el dinero de la recaudación del boliche ubicado en Playa Grande.
Romito dijo que no tiene ninguna vinculación con el hecho más allá de haber estado presente cuando se produjo. En su defensa, Romito alegó que "el manejo de dinero que hay en el lugar es algo que saben todos" dentro del boliche y no solamente él. Inclusive, el acusado en carácter de "coautor" por el delito de "homicidio en ocasión de robo" aseguró en su declaración que fue una de las primeras personas en asistir al sonidista de 32 años después de escuchar a la distancia el ruido de la fatídica detonación.
No obstante, los dichos de Romito, por el momento, no cambian su situación en la causa y deberá permanecer detenido todo el fin de semana extralargo en el penal de Batán, hasta tanto surjan nuevas pruebas en el expediente que confirmen o no su participación en el hecho.
Cabe traer a colación que, en el marco de la investigación, la fiscal Gómez mantiene la búsqueda de Eduardo Maximiliano Urra Zapata, quien habría estado a bordo del Clio color blanco que actuó de soporte en la maniobra delictiva que se consumó en el paseo costero de Playa Grande, y de un tercer hombre, cuya identidad aún tercer hombre y que sería quien gatilló contra el DJ.